Es una de las señas de identidad de la saga Metroid desde sus albores. Samus Aran, la archiconocida cazarrecompensas, es capaz de convertirse en una pelota gracias a la morfosfera, lo que le permite pasar por lugares estrechos y recónditos, utilizando esa habilidad en su favor.
Normalmente, en los videojuegos todo es posible y no nos preguntamos demasiado sobre la veracidad de las opciones que ofrece un título de ciencia ficción. Pero mentiríamos si dijéramos que nunca nos lo hemos preguntado. ¿Es físicamente posible que Samus Aran se convierta en pelota? En caso afirmativo, ¿cómo coloca su cuerpo para adoptar esa posición? Vamos a tratar de responder todas las preguntas al respecto.
Apoyados en un reportaje de Polygon, vemos el estudio de una de las acciones más conocidas de la cazarrecompensas, donde se analiza el tamaño y la altura de Samus en función de los bloques de construcción que aparecen en el escenario, y que nos da pistas de un misterio que lleva inquietando a los fans desde los orígenes de una de las licencias más influyentes del mundo de los videojuegos.
Pero, vamos a lo simple. ¿Cómo es capaz de adoptar Samus esa postura? Y vamos más allá, ¿cómo es capaz de ver su entorno si está constantemente girando sobre sí misma? Esto hace dificilísimo que sepa orientarse y, sobre todo, no marearse en el intento.
En el citado artículo citan que la morfosfera funciona de forma similar a la de un globo ocular de juguete, por lo que Samus estaría envuelta sobre sí misma, pero con una postura siempre erguida. Según los tamaños que se barajan, cuando la heroína está usando la morfosfera mide alrededor de un metro, que es prácticamente la mitad de la altura; aunque el tamaño de Samus y lo que ocupa "hecha bola" ha ido variando ligeramente en todas las entregas.
En Metroid Dread, por ejemplo, última entrega publicada en Nintendo Switch, la morfoesfera resulta ser bastante pequeña, siendo un tercio del tamaño de Samus, y no la mitad, como en otros muchos juegos. Es un aspecto demasiado pequeño y no hay razón aparente para ello. ¿Por qué? Es algo que tendríamos que preguntar a la gente de Mercury Steam y, teniendo en cuenta que es algo que nos inquiera bastante en la redacción, no descartamos hacerlo.
Respecto a la pregunta de si es físicamente posible que Samus adopte esa postura de forma natural, es difícil responder y hay varias teorías. Una de ellas, la más simple, es que su cuerpo es flexible y es capaz de adoptar varias formas gracias a la tecnología Chozo, de la que si conocéis la historia del personaje, la protagonista tiene en su sangre. Así, sus ojos y cerebro se mantienen estabilizados mientras gira. Pero, de confirmarse esta teoría, quizás no volveríamos a ver a la cazarrecompensas de la misma forma.
Otra teoría más mística es que Samus se convierte en esos momentos en energía pura, tanto su mente como su cuerpo, para que pueda girar y acelerar sin sentir nada. Hay defensores de esta teoría filosófica denominada "Schroedinger’s Vom". Algunos creen que corre dentro de la pelota: la morfoesfera es opaca y no vemos lo que hay dentro. También hay quien se pregunta dónde se almacenan las bombas destructoras que lleva consigo y va plantando en dicha forma.
Hay muchos que se conforman, simplemente, con que usar la morfoesfera es divertido a la hora de jugar, y punto. Y casi preferimos quedarnos con eso.