Una de las asignaturas pendientes que Riot Games ha sido capaz de resolver en League of Legends durante el pasado año es la de los nuevos campeones. Históricamente, los personajes tenían una preocupante tendencia a llegar demasiado rotos o a recibir una sobrerreacción por parte de la desarrolladora si no tenían éxito en sus primeros días en la Grieta del Invocador. Sin embargo, durante todo el 2020 hemos visto a una desarrolladora renovada que, a excepción del caso de Samira, ha sido capaz de cumplir con su nueva filosofía.
Viego fue la última prueba de fuego que tuvo que superar Riot. El campeón debutó en League of Legends con un ratio de victorias bajísimo que en otro tiempo hubiera provocado un hotfix prácticamente inmediato para dotarlo de mejores estadísticas. Sin embargo, la desarrolladora superó la prueba con nota y el tiempo le ha dado la razón: tras varias semanas en el servidor en vivo el campeón ha sido capaz de acercarse a la siempre buscada tasa del 50% de victorias.
La última gráfica nos muestra unos datos que parecen confirmar la tendencia generalizada de los nuevos campeones: conforme los jugadores van aprendiendo a utilizar un personaje su tasa de victorias aumenta hasta que llega a un punto de equilibrio. Es ese momento en el que podemos basarnos en datos reales y no depender solo de indicadores creados en base a los resultados que consiguieron otros personajes.
De hecho, el caso de Viego tiene una pequeña pega. El campeón es demasiado poderoso en el carril central, una situación que Riot quiere solucionar incluyendo una pequeña reducción de poder en el próximo parche 11.4 que ya está anunciada en el PBE y que afectará a su posibilidad de curarse golpeando a súbditos. Un desliz ínfimo que, eso sí, evitará que replique el caso de Lillia, que todavía no ha recibido ningún cambio desde su estreno.
Riot confirma así su nueva filosofía y repite logros ya conseguidos durante todo el año. Es cierto que con Samira se generó cierta desconfianza en la desarrolladora, pero parece que han sabido reencontrarse con el camino correcto y que League of Legends está en mejores manos que nunca.
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