Siren: Blood Curse, uno de los juegos de terror de los que menos se oye hablar y que, si os gustan experiencias recientes como The Evil Within (que entraremos más adelante) es sin duda una elección excelente. Desarrollado por Project Siren, el título explora las leyendas urbanas y cómo estas pueden ser reales y convertirse en nuestra peor pesadilla. Originalmente, el juego fue lanzado para PS3 en 2008, y sigue manteniendo el tipo sin ningún tipo de problema, puesto que esa suciedad visual y esa iluminación algo desgastada solo suman puntos para su ambientación, que es muy a lo La Matanza de Texas (1974, Tobe Hooper).
El título de Project Siren, al contrario que otros que os acabamos de mencionar, huye un poco de esa sensación de mantener vulnerable al jugador y le otorga la posibilidad de armarse hasta los dientes, o más bien lo justo, para defenderse de los peligros a los que se enfrenta. Por así decirlo, es un hijo bastardo de Resident Evil 4 y de la evolución de la fórmula que realizó Shinji Mikami en 2004.