El tema estrella en Reddit y Twitter no es otro que la toxicidad en League of Legends. Un problema latente y que poco a poco todos habíamos entendido que formaba parte de las reglas invisibles del juego, está convirtiéndose en un asunto que no deja de crecer a la espera de que Riot Games tome las decisiones pertinentes para asegurar la salubridad del título.
Este repunte, que sin estadísticas oficiales sobre AFKs, jugadores banneados y mensajes tóxicos en el chat no es más que una sensación compartida por una importante parte de la comunidad del juego, necesita de unas razones sólidas para poder llegar a ese punto de partida: que hay algo que arreglar en cuanto a la toxicidad en League of Legends.
Consideraciones previas
Cuando se habla de mala suerte en el juego, siempre intervienen conceptos estadísticos como la varianza y la ley de los grandes números. A mayor muestra, mayor normalización de los resultados. Esto quiere decir que el hecho puntual de que tengas una persona de tu equipo que se marche en tu partida clasificatoria de League of Legends y la consecuente pérdida de puntos se compensará en el futuro con una partida en la que esto suceda en el otro equipo.
Esto es así cuando se producen casos puntuales, o al menos es posible que los jugadores más racionales lo perciban así. Si este tipo de casos suceden más de lo recomendable, empieza a generarse una frustración en el jugador que no ha hecho nada malo y que tiene que pagar por los pecados de un desconocido.
Un aumento en los casos propios de jugadores tóxicos es posible y podría romper ese delgado equilibrio que separa la irregularidad estadística de una realidad palpable. Cuando gente con diez años de experiencia jugando SoloQ como Voyboy afirma que es el peor momento de la historia del juego, hay que escuchar. Lamentablemente, no disponemos de los datos estadísticos de Riot Games.
Lo evidente: jugamos más que nunca
No es el mejor momento para nada. El Coronavirus nos tiene a todos confinados en casa y cae de cajón que muchos están usando League of Legends como distracción. Y más allá de eso, el cliente de juego ha tenido problemas de saturación que todos hemos vivido durante estas últimas semanas. Hay más gente que nunca jugando a League of Legends.
Pero el estado mental de estas personas tampoco es el correcto. Es cierto que League of Legends no deja de ser un juego, y que puede carecer de la importancia suficiente como para enfadarse y realizar acciones que perjudiquen al resto de jugadores. Sin embargo, cada partida también es un compromiso de alrededor de media hora con otras 9 personas para pasar un buen rato. Al igual que no insultarías a unos compañeros de pachanga de fútbol o les dejarías con uno menos a mitad de la misma, cabe esperar lo mismo en League of Legends.
La gente que está echando una partida contigo al LoL tiene problemas como que sus padres se han quedado sin trabajo por culpa del Covid-19, que sus profesores de la universidad no tienen el suficiente aprecio por su situación o, directamente, tener que estar durante dos meses en sus casas sin poder ver a sus familiares y amigos. A más jugadores y más problemas personales, es razonable pensar en un repunte de la toxicidad in-game.
Y saturamos más que nunca
El Coronavirus no solo afecta a League of Legends de esa manera. El equipo de soporte del juego, que tiene como una de sus tareas el revisar los reportes, parece no estar trabajando en ese asunto en estos momentos. Tal y como se puede leer en el perfil de Twitter del especialista en apoyo al jugador de Riot Games Vondalv, EUW no está realizando una revisión manual de los reportes.
League of Legends tiene herramientas automatizadas para detectar conductas tóxicas o insultos en el chat, pero otros tipos de abusos por parte de jugadores no está siendo atendido. Todo apunta a que se trata de un hecho dependiente de la triste situación que nos ha tocado vivir a nivel global, pero es un factor que no ayuda.
El SoloQ Challenge de Elmillor y la cámara de eco
Durante estos días se está disputando una nueva edición del SoloQ Challenge de Elmillor. Este torneo basado en lograr la mejor clasificación en League of Legends durante un periodo concreto de tiempo, ha elevado sustancialmente la audiencia en Twitch de muchos streamers. También se ha elevado la competitividad de estos.
En apenas un par de días de torneo, hemos estado presenciando multitud de ataques de ira y enfados por parte de participantes. La razón no es otra que lo que llevamos comentando una buena parte del texto. Gran cantidad de AFKs, personas que no se comportan con un mínimo de educación y profesionales del inteo que arruinan las partidas.
De no existir el SoloQ Challenge no estaríamos bombardeados de contenido que redunda en lo mismo; que el estado de las partidas clasificatorias y de la comunidad de League of Legends no es el mejor del mundo. Puede que estos streams no sean la muestra más representativa de la realidad que vive el jugador medio del LoL, pero sí que es una muestra válida.
Según cuenta el Brand Manager de LoL y Wild Rift Ricardo Kails, hoy mismo habrá comunicación de Riot Games al respecto de la situación actual de League of Legends. Riot Meddler, el director de League of Legends lanzará un Diario de Desarrollo sobre la toxicidad y el comportamiento de ciertos jugadores.