Una de las diferencias más evidentes entre los jugadores de League of Legends es el nivel de habilidad. El talento individual puede hacer que nuestra experiencia se transforme y que disfrutemos más de determinados campeones o que cambiemos nuestra actitud a la hora de encarar las partidas. Es una situación que reconoce hasta la propia Riot Games que tiene en cuenta diferentes grupos en función al rango para tomar decisiones clave en cuanto al equilibrio del juego
La diferencia en la habilidad de los jugadores se manifiesta de diferentes formas y una de las más evidentes es en el comportamiento. La mentalidad a la hora de encarar las partidas es diferente en función al rango en el que esté cada jugador y en los más altos vemos, por ejemplo, que la tendencia a abandonar las partidas es menor. Sin embargo, hay un dato mucho más llamativo a este respecto que lo encontramos en la actitud ante la posibilidad de rendirse.
Así afecta el rango al comportamiento de los jugadores
Un vistazo a las estadísticas de rendición nos muestra cuál es el efecto del rango en esta probabilidad y marca una tendencia extraña. La tendencia de los jugadores a rendirse parte desde un porcentaje elevadísimo en las partidas no clasificatorias y hierro, va bajando poco a poco y toca techo conforme nos acercamos a las zonas más altas del ranking de League of Legends. Una curiosidad estadística que conecta los dos extremos de la tabla y que también cambia en función a la región.
Los jugadores que más se rinden son los de Challenger, que terminan un 38,1% de sus partidas tras una votación. Sin embargo, vemos una clara tendencia a partir de Oro en la que conforme subimos en la clasificación más fácil será que nuestra próxima partida acabe en rendición. Un valor que se refleja también en la duración de las partidas que, ya de por sí decrecientes, apenas duran 25 minutos de media en el rango más codiciado de League of Legends.
Aunque no hay una explicación clara, la decisión bien podría estar vinculada al mayor conocimiento del juego que permite que las situaciones de derrota se identifiquen más pronto. Además, no es lo mismo tratar de esperar los errores de un equipo en zonas clasificatorias intermedias que del top mundial de jugadores, lo que también puede causar un mayor desánimo. Como curiosidad, se cumple también una tendencia habitual en League of Legends: en las clasificatorias flexibles las estadísticas de rendición son más altas.