Hay pocas sensaciones más desagradables en League of Legends que encontrarnos con cambios excesivos a nuestros campeones favoritos. A todos nos entra un poco de miedo cada dos semanas cuando enfrentamos la posibilidad de que Riot Games decida cambiar a nuestros personajes mediante modificaciones incluidas en la próxima versión. Sin embargo, la desarrolladora a alcanzado cierta maestría en cuanto a modificar héroes y tiene unos cuantos trucos para reducir su poder sin que casi lo notemos.
De eso vamos a hablar hoy, de las formas más sutiles en las que la desarrolladora es capaz de llevar a cabo algunos cambios que pueden modificar el metajuego sin que percibamos una reducción de poder excesiva en tal o cuál campeón. Métodos mucho más elegantes que no afectan tanto a la jugabilidad, pero que sirven para modificar picos de poder o rendimiento general de forma general.
Velocidad de movimiento
De todos los métodos, este es el más evidente. Muy de vez en cuando, Riot Games realiza modificaciones en la velocidad de movimiento básica de los campeones que son mucho más eficaces de lo que crees. Es una de las estadísticas clave de los personajes y es capaz de habilitar jugadas o hacer que no lleguemos a tirar habilidades, así que Riot es bastante prudente con este tipo de modificaciones.
Las pruebas indican que un cambio de velocidad de movimiento en positivo o negativo puede tener un efecto más que notable, modificando en torno a un 2% el ratio de victorias de los campeones. El más famosos es el caso de Kassadin, que con un nerf de estas características redujo su win rate del 52,6% al 49,68%. Todo por cinco puntos menos de velocidad de movimiento que parecían irrelevantes.
Este tipo de cambios se han realizado a multitud de campeones, aunque parecen del viejo libro de estilo de Riot Games, ya que la desarrolladora no se ha prodigado mucho con ellos últimamente. Si no creéis en su eficacia, hay ejemplos múltiples: Aphelios, Morgana, Karthus y Udyr son solo algunos. Incluso los cambios algo más sutiles a las bonificaciones de ciertas habilidades como la W de Draven o Rammus han demostrado ser tremendamente eficaces.
El precio de los objetos
Si abres las notas del parche para ver que un objeto de tu campeón ha subido cincuenta de oro y lo cierras tranquilamente, estás cometiendo un error. Este es uno de esos cambios sutiles que Riot Games hace con la cabeza puesta en el juego de mayor nivel y que puede parecer irrelevante para los jugadores menos experimentados. Sin embargo, cuando tocan este tipo de sistemas normalmente hay un razonamiento bastante profundo por detrás.
El último caso y el que ha motivado este recopilatorio es el aumento de oro de las Botas jonias de lucidez. Simplemente pasaron de costar 900 de oro a 950, pero este cambio fue más que suficiente como para hacer que los junglers no pudieran abusar este objeto con su vuelta a base tras una primera limpieza de los campamentos. Así, la segunda sería más dura o, en caso de esperar por el oro, podrían ser invadidos con facilidad.
Estos cambios son algunos de los menos habituales y, en ocasiones, Riot Games solo cambia el oro de un objeto para que mantenga un ratio de efectividad por coste idéntico. Aun así, hay que prestar atención a estas modificaciones que pueden alterar los picos de poder de los personajes para que estén más o menos equipados en un determinado minuto.
Cambios al mapa y a la jungla
Hasta ahora tenemos una modificación directa infravalorada y un cambio sutil, pero ya es el momento de adentrarnos en una consecuencia indirecta de cambios que tienen un objetivo mayor. Las grandes alteraciones al metajuego que llegan con las temporadas o los pequeños cambios que hacen que la jungla sean más o menos resistente pueden alterar por completo el metajuego de todos los carriles.
Uno de los ejemplos más claros es el del Cangrejo Escurridizo. Conforme aumenta su importancia, más y más junglas se quedan fuera del juego si no son capaces de asegurarse al menos uno de los dos primeros, algo que también le da un valor importante a la prioridad del juego temprano y que puede hacer que tengas que elegir un determinado personaje en función a la ruta que seguirá tu jungla. Un efecto en cadena prácticamente imparable que también sucede con cambios mayores.
League of Legends es un sistema en el que todas sus partes están interconectadas y todos estos conceptos son los que componen el metajuego. Si uno cambia, todos pueden cambiar para adaptarse a la modificación previa. Incluso sin acción directa de Riot Games, el descubrimiento de una nueva estrategia puede modificar por completo el sentido de un campeón en el juego.
Cambios a otros campeones
Dentro de las mejoras o nerf indirectos que puede llevar a cabo Riot Games para modificar a terceros campeones, tenemos una amplia variedad de supuestos. Así, por ejemplo, que Lulu mejore en un momento determinado bien podría significar que Kog’Maw y otros hipertiradores ganen repercusión debido a su sinergia. Aunque también podría acontecer lo mismo por el caso contrario: si Vladimir es mejor que antes, sus principales counters también deberían ganar en prioridad.
Aunque este sistema de fortalezas y debilidades no está tan desarrollado en League of Legends como en otros juegos, si es suficientemente notable como para que pueda tener repercusión. Ha habido casos destacados a lo largo de la historia, como la clara tendencia de Viktor y Corki a aparecer más cuando Azir está dentro de los mejores del metajuego o el aumento de popularidad de Poppy cuando ocurre lo mismo con Fiora.
League of Legends es un sistema relativamente limitado en cuanto a campeones (aunque tenga más personajes únicos que casi cualquier juego) y aquí las ya mencionadas reacciones en cadena son todavía más destacadas.
Correcciones de bugs
Aunque sea de forma inconsciente, hay muchas formas en las que podemos utilizar los bugs para aumentar nuestro rendimiento en partida. Por ejemplo, en la LCS norteamericana descubrimos que Irelia era capaz de evitar el impacto de algunas habilidades gracias a la velocidad que adquiría con el desplazamiento de su Q (Embate de Espada). Una función casi desconocida que acabó con su capacidad de sobrevivir a algunas emboscadas en el carril central.
Estas correcciones pueden ser positivas o negativas en función de los campeones. En la actualidad, por ejemplo, Kog’Maw todavía puede golpear con un ataque básico en el momento en el que salta su pasiva si se cumplen determinadas condiciones. No cabe duda de que el día que eliminen esa función para que no se reproduzca el error, el campeón habrá perdido un poco de poder.
Pese a todo, eliminarlas no es sencillo. League of Legends arrastra unos cuantos problemas de código desde su creación y estos errores se han convertido, prácticamente, en mecánicas ocultas de algunos campeones que llevan años en el juego. Eso sí, la desarrolladora lo intenta. Sin irnos más lejos, Jinx recibirá un nerf por corrección de bugs en el próximo parche.
Cambios revertidos
En la Temporada 5, Soraka tenía una función única: eliminaba las heridas graves de todos los campeones antes de aplicar su definitiva de curación global. El efecto le permitía seguir sacando partido a todo su kit de habilidades, pero se eliminó debido a un cambio en la mecánica de reducción de curación que hacía que solo fuese eficaz contra el robo de vida de los campeones, sin afectar a estas curas externas.
Pasaron seis meses hasta que Riot se dio cuenta de que el sistema no tenía demasiado sentido y recupero la vieja función de las heridas graves. Sin embargo, Soraka perdió igualmente esta función de su definitiva por el camino y hoy en día sigue sin ser capaz de ayudar a sus compañeros con tanta eficiencia como antaño. Un cambio en dos tiempos que, fruto de lo que probablemente fue un error de la desarrolladora.
No es un caso muy habitual en League of Legends, pero sí puede llegar a ser crucial para el futuro de algunos campeones.
Recortes y funciones eliminadas
La historia de League of Legends cambió cuando Riot Games eliminó el Cuchillo del Furtivo, la posibilidad de comprar Centinelas de Visión o la capacidad de acumular varios objetos de apoyo. Incluso el Elixir del Oráculo, un objeto que ahora suena como del paleolítico, modificó el metajuego empeorando algunos campeones y mejorando otros.
Los cambios fueron especialmente notables en la jungla, donde el recorte del gasto en visión dejó mayor espacio a campeones con mayor potencial de carry e imposibilitó el juego basado en el control total. Una de las decisiones más polémicas de la historia del juego que todavía tiene consecuencias hasta nuestros días y que alteró por completo el plantel de campeones viables.
Para entender la magnitud del cambio solo hay que pensar en que pasaría si los junglas pudieran volver a comprarse la piedra de visión o acumular objetos de apoyo en lugar de seguir centrados en emboscadas y limpieza de campamentos. Uno de los cambios indirectos que más hizo variar la historia de League of Legends.