Call of Duty: Warzone está viviendo una de las épocas más convulsas de su historia. Pese a que la integración del juego con el universo del nuevo Black Ops Cold War debía ser motivo de celebración, unos cuantos errores por parte de Activision a la hora de llevar a cabo el proceso lo han convertido justamente en lo contrario. El fallo más evidente y del que hablan casi todos los jugadores es el de las armas, ya que algunas de ellas han llegado al battle royale en un estado completamente desequilibrado que desde la desarrolladora no parecen saber corregir.
Después de un primer nerf que fue un absoluto fracaso, el DMR 14 sigue siendo el arma por excelencia para dominar Verdansk y la Isla Renacer. Todo Call of Duty: Warzone tiembla ante ella y se ha cansado de tener que elegirla si quieren jugar en igualdad de condiciones con los rivales. Algo que ha generado un cansancio que empezó en la comunidad y que ha acabado llegando a muchos de los streamers del juego que también han acabado desesperándose por esta desagradable situación.
Dr. Disrespect, uno de los creadores de contenido más reconocibles y extrabajador de la franquicia, ha señalado que el nerf apenas se nota ya que, aunque hay que dar un tiro más, “esa cosa dispara tan rápido que ni siquiera importa”. Una opinión en un tono muy similar a la de NICKMERCS, que también es uno de los streamers más populares del juego, que señala que todo el mundo está harto de DMR 14 y que ya lleva demasiado tiempo dominando el juego.
Es precisamente este segundo creador de contenido el que le ha querido dar una lección a Activision y Raven Software proponiendo un nerf que solucionaría las cosas. Básicamente, sugiere cambiar la munición que utiliza el arma para que dispare balas de francotirador (más difíciles de acumular) y reducir ligeramente la cadencia de fuego. Muy en sintonía con otros jugadores de Call of Duty: Warzone que ya han señalado que el arma debería sentirse como si realmente fuera de 1980.