El lanzamiento de League of Legends: Wild Rift va a traer cola. Aunque todo el mundo se podía esperar que se estrenará de forma escalonada en las diferentes regiones del mundo, nadie podía ver venir que en América las cosas se fueran a dilatar tanto. Mientras que en Europa tendremos el juego a partir de principios del próximo mes de diciembre, al otro lado del Atlántico tendrán que esperar hasta 2021 para disfrutarlo en sus dispositivos.
El retraso es difícil de explicar y más teniendo en cuenta el silencio de Riot Games al respecto. Se barajan teorías diferentes y es bastante evidente que esto es un problema para la compañía y muy probablemente depende de factores externos. Las especulaciones apuntan a las disputas entre India y China o los vetos del presidente Donald Trump a las empresas chinas. Sin embargo, no hay nada claro al respecto.
Esta primera situación ya fue tremendamente dolorosa para la comunidad, pero todavía se ha hecho peor al anunciarse un torneo con diferentes personalidades de League of Legends que tendrá lugar en la región y que demuestra que, efectivamente, el juego está en un estado aceptable para ser probado por algunos jugadores. Una medida que muchos querrían ver ampliada en forma de beta, alpha o cualquier argucia que les permitiera probar el juego.
En principio se trata de un evento promocional de Apple y su nuevo iPhone 12 que comenzará el próximo día 22 de octubre y en el que, como mínimo, tenemos asegurada la presencia del legendario support Zaqueri Black “Aphromoo”.
Riot Games ha explicado en muchas ocasiones porque facilita el acceso a Wild Rift a determinados influencers o creadores de contenido y, aunque en estos casos la lógica era inapelable, lo cierto es que en esta ocasión si se siente como un trato de favor. Incluso en el probable caso de que la decisión de retrasar el juego en Norteamérica fuera fruto de un imprevisto hubiera parecido mejor solución cancelar la campaña y dejarla para un poco más adelante.