Llevamos ya seis meses con Marvel's Avengers en el mercado y las cosas no están yendo como a Crystal Dynamics le gustaría. Desde que Destiny irrumpió en el mundo de los videojuegos, muchas compañías y estudios han querido ofrecer juegos como servicio a los jugadores para crear su propia comunidad de usuarios y poder tener entre manos un producto que dure una cantidad considerable de años que, hablando en plata, dé un flujo de beneficios, tanto económicos como de actividad. Pero la fórmula mágica que brindó Bungie ya está muy manida y se ha visto hasta la saciedad. De hecho ni la propia Bungie fue la primera en mostrar algo así, pero tuvo la habilidad de saber pulirla hasta convertirla en un diamante buscado por muchos.
En todo este tiempo Marvel's Avengers ha ido recibiendo contenido para mantener viva y con ganas de continuar jugando a la comunidad que permanece fiel al título, ya sea por el amor que se le tienen a los Vengadores y al universo de Marvel o porque la fórmula resulta de lo más adictiva y se prefiere esta especie de hero brawler que un first person shooter. Pero ese contenido, en el que nos centraremos a través del último DLC que ha llegado al juego protagonizado por Ojo de Halcón: Futuro Imperfecto. Antes de eso, nos centraremos en cómo ha sido ese salto de generación para el juego y qué tal luce en PS5 y Xbox Series X/S.
Crystal Dynamics ha lanzado, de una vez por todas, su juego sobre los Vengadores. Después de empezar su paso por los videojuegos con el pie izquierdo, con esa polémica presentación en el E3 2019 y con algún que otro retraso, analizamos esta nueva aventura de los creadores del reboot de Tomb Raider.
Uno de los problemas más graves que tenía Marvel's Avengers, allá por septiembre cuando llegó de forma oficial después de algún que otro retraso, era que su rendimiento no estaba para nada a la altura. El juego, aunque se podía disfrutar sin ningún tipo de problema, tenía muchísimas bajas de frames y el gameplay se volvía de lo más inestable cuando entrábamos en combate con muchos enemigos y, por ejemplo, estábamos usando a un personaje que podía hacer mucho daño en área y, por tanto, darse de leches con todos esos enemigos al mismo tiempo. Es decir, que personajes como Hulk, Kamala o Thor hacían que el juego reventase y se fastidiase la experiencia.
La gracia de un juego como Marvel's Avengers es precisamente la acción frenética que ofrece y cómo tú, como superhéroe, puedes destrozar a múltiples rivales sin despeinarte y de las formas más épicas posibles. Vaya, que para eso tienen que haber explosiones a raudales y poderes o habilidades por todas partes, y eso implica muchos efectos de luces que, a nuestro parecer, las consolas de pasada generación podían soportar con pinzas.
¿Qué tal funciona en PS5 y Xbox Series X/S?
Yendo directamente al grano: el salto a PS5 y Xbox Series X/S de Marvel's Avengers ha sido justo lo que el título necesitaba. El título de Crystal Dynamics por fin puede funcionar como debería haber hecho desde un principio, sin problemas de bajas de frames en los momentos de acción, con elementos destructibles por el mapa que lucen correctamente y con efectos de iluminación y color mucho más detallados. Marvel's Avengers, en ese sentido, se siente mejor que nunca y hasta dan ganas de volver a rejugar entero. Parece una tontería, pero una vez entras en la dinámica de los 60FPS y el 4K, ya no hay vuelta atrás (a elegir por supuesto entre el clásico modo rendimiento o modo resolución). Ahora podemos pegarnos tanto como quedamos con Hulk, lanzar rayos y truenos con Thor y pegar golpetazos con Kamala a tantos enemgios como queramos, porque el juego se mantendrá firme y no caerá en ningún momento. La fluidez de los personajes se siente como nunca y ahora sí que podemos disfrutar “sin tirones” ni problemáticos bugs que hacían que casi tuviéramos que cerrar el juego en determinados momentos.
A eso hay que sumarle que ahora los tiempos de carga, como en casi cualquier videojuego de nueva generación, no existen. Se acabó aquello que tener que soltar el mando cada dos por tres para esperar a que carguen los menús o nos meta en una nueva misión. Sin hablar tampoco de lo que se tardaba antes en buscar partida o mejorar a nuestros superhéroes. Marvel's Avengers ahora va a la velocidad de la luz y, tal y como ocurre con el problema solucionado de los frames, invita a echarse unas partidas extras para explotar más estas funciones mejoradas.
Para muchos, sobre todo para aquellos que no sean demasiado quisquillosos a nivel técnico, todo esto puede parecer una tontería que no mejora en absoluto lo que es el juego en sí, pero en realidad es como darle un soplo de aire fresco a la obra. Aunque Crystal Dynamics ofreció en su momento una entrega que era bastante aceptable, se notaba como algo inacabado y limitado. Y ahora eso ya no se siente así, lo cual denota que Marvel's Avengers, ya sea en menor o mayor medida, ha ganado un plus metiéndose en la nueva generación de consolas.
Futuro Imperfecto, un DLC que no termina de convencer
Después de Kate Bishop, ahora le toca el turno a Ojo de Halcón, el mítico arquero de los Vengadores que se ganó a pulso el calor del público gracias al peso del personaje en Vengadores: Endgame. Las expansiones de Marvel's Avengers no funcionan exactamente igual que como en Destiny u otros videojuegos como Borderlands 3, por ejemplo. En estos últimos, esas expansiones cuentan una historia y nos transportan a niveles y escenarios que, en principio, jamás hemos tocado antes en el juego base. Con una duración, aproximadamente, de unas cinco u ocho horas, ya dependiendo de la habilidad de cada uno y de lo que exploremos.
No obstante, con Futuro Imperfecto (como ocurrió con el caso de Kate) nos hemos topado con una nueva experiencia un tanto escueta que apenas nos ha llevado más de dos horas en completar, y realizando las misiones secundarias de cada nivel. La trama, aparte de servir como excusa para introducir a Ojo de Halcón y colarnos un par de skins para este último y para Hulk, no aporta gran cosa a la obra y tampoco es nada del otro mundo. Sí, es cierto que lo que la campaña en general de Marvel's Avengers tampoco quería brindar una trama compleja. Más bien una aventura de acción para que el jugador pudiera ir pasando de un vengador a otro y usar sus poderes en combate contra robots gigantes y jefes finales que daban verdadero miedo (como Abominación).
Sin embargo, no podemos pasar por alto que lo que añade este DLC a ese conjunto a algo tan nimio que no cobra ningún tipo de importancia ni genera ningún interés en el jugador. Es más, hasta puede provocar rabia por ver que, teniendo personajes tan alucinantes como Hulk Maestro o El Viejo Ojo de Halcón, apenas de ha hecho nada para que estos tengan realmente un impacto poderoso sobre el título.
Ahora bien, lo que sí nos ha encantado es la jugabilidad que presenta Ojo de Halcón. Había ciertas dudas sobre cómo lo haría Crystal Dynamics para separar a este personaje de Kate Bishop, puesto que ambos parten de las mismas bases y usan las mismas armas. Y nos hemos topado con un Vengador que, sin duda, usaremos en más de una misión e intentaremos subirlo al máximo para poder ver hasta dónde es capaz de llegar. Su daño en área es prácticamente nulo y está claramente diseñado para ser un personaje a distancia que vaya restando vida atacando a las partes más débiles de los rivales más grandes a la par que va limpiando el mapa de los más, digamos, “molestos” que se complementan con los enemigos especiales. Ideal para combinarse con un Hulk y un Capitán América o Kamala, por ejemplo. Pero pierde brillo en cuanto se une con Iron Man o Kate en un mismo equipo, dado que se requiere de otro superhéroe que tenga una potencia buena en el cuerpo a cuerpo.
En conclusión
Este salto a PS5 y Xbox Series corta con todos los problemas de rendimiento del juego y, ahora, se puede disfrutar por completo. Solamente falta que el contenido que ofrece mejore para que la comunidad de usuarios que adquirió el juego en su momento vuelva una vez más a echar unas horas extras.
A todo el mundo le fastidia que le dejen sin vacaciones, lo único bueno es que al menos tenemos entretenimiento.
