Si dejamos a parte las estrategias alternativas, Janna se ha convertido en el mejor campeón de League of Legends con mucha diferencia. El personaje de apoyo es superado por Tahm Kench en la posición de tirador y acompañado por Senna, pero exceptuando esta particular combinación es la heroína mayor tasa de victorias. Gana un 55% de las partidas disputadas en los MMR superiores a platino siendo baneada solo en un 2,3% de las mismas y sin que nadie se queje de ella. Ni post en Reddit ni grandes hilos de Twitter. La comunidad, en su práctica totalidad, simplemente la ignora.
Las sensaciones de los jugadores de League of Legends
La estadística nos dice que cometemos un error y debería hacer que salten todas las alarmas de Riot Games. Janna cumple con los criterios por los que los desarrolladores deben entrar ‘de oficio’ a nerfear un personaje. Sin embargo, nadie en la compañía parece dispuesto a ello. Una situación que se evidencia si tenemos en cuenta que su última reducción de poder llegó en el parche 12.3 mediante un 'hotfix'. Desde entonces se ha mantenido a muy buen nivel destacando especialmente en este último mes en el que el juego apenas ha recibido cambios. Lo peor es, sin embargo, que tampoco hay planes de ajustarla en la próxima versión.
Aunque Riot Games estará preparando un buen golpe para la campeona que todavía no nos han comunicado, es muy probable que en la desarrolladora se estén frotando las manos. La compañía ha trabajado muchas veces con la teoría de que las quejas de la comunidad sobre el equilibrio del juego no suelen estar relacionadas con la realidad si no con su percepción. Por decirlo de otro modo, los jugadores tienden a señalar como negativos los campeones que consideran más frustrantes por su daño (Zed) o mecánicas (Yasuo) en lugar de los que realmente deciden partidas de formas algo más sutiles.
En cierto modo es una situación lógica. Aunque parte del público está muy atenta a las estadísticas, es difícil determinar a simple vista lo que hacen Janna o campeones como ella en una partida. Es cierto que aportan algo de utilidad al equipo y son verdaderamente útiles, pero algunos de sus efectos son sumamente discretos. Una situación que se da por ejemplo en las pasivas de velocidad de movimiento de la campeona, una estadística infravalorada entre la comunidad de League of Legends y muy difícil de detectar, pero con una gran influencia en la tasa de victorias.
La primera vez que en Riot Games se dieron cuenta de la magnitud de este efecto fue con el lanzamiento de Zyra. La campeona protagonizó uno de los estrenos más rotos de la historia de League of Legends, pero cuando los desarrolladores decidieron reducir su poder la comunidad se quejó alegando que ya era suficientemente débil. Un primer indicio que desde entonces se ha confirmado en numerosas ocasiones. Es algo que podemos observar en la tasa de baneos de los personajes, donde la comunidad tampoco sigue una estrategia eficiente.
League of Legends cuenta con más casos similares al de Janna. Sin embargo, esta es la campeona que hace saltar las alarmas. Alcanzar un 55% de tasa de victorias es un hito que muy pocos personajes han logrado a lo largo de la historia. Menos aún en un parche tan largo como el 12.5, que ha durado todo el mes recibiendo una única revisión en la que las modificaciones fueron bastante tímidas. Punto negativo para Riot por no ajustarla. Ahora que han saboreado el siempre delicioso “tenía razón”, es el momento de ponerle freno.