La posición de jungla es, con diferencia, la más controvertida de League of Legends. A lo largo de los últimos años, Riot Games se ha encontrado con una paradoja. Por una parte, estamos ante el rol considerado como más poderoso del juego. Por la otra, con uno que nadie quiere jugar. Una situación prácticamente inexplicable si no atendemos a los detalles y sutilezas de esta posición que la desarrolladora no consigue acabar de equilibrar pese a todos sus esfuerzos.
El gran problema de la jungla según la comunidad
La mayor parte de los problemas señalados por la comunidad en cuanto al interés que genera esta posición fueron solucionados por la desarrolladora hace unos cuantos parches con el gran cambio que recibieron los campamentos. Sin embargo y más allá de las quejas continuadas sobre su excesivo poder, sigue habiendo aspectos en los que existe una gran disconformidad entre los jugadores con respecto a la satisfacción de esta posición.
Para algunos miembros de la comunidad el problema va mucho más allá de los aspectos en los que Riot Games puede meter mano. Según esta teoría, uno de los principales fallos está en los propios jugadores que exigen demasiado a sus junglas, de forma que se pone demasiada presión sobre ellos y críticas cuando las cosas no acaban de marchar. Así, mientras “no pasa nada” cuando otras posiciones no toman el camino óptimo, no sucedería lo mismo para los junglas que son demasiado presionados por sus compañeros.
La reflexión del jugador concluye con una clara declaración de intenciones en la que afirma que volverá a la posición de support ya que “la jungla no es divertida por culpa de la comunidad y no del rol en sí mismo”. Una reflexión que ha acumulado más de un millar de votaciones positivas en apenas doce horas y que requerirá de un trabajo mucho mayor que simples ajustes de equilibrio.