Una de las estrategias de Riot Games para diferenciar Valorant y hacerlo más atractivo fue intentar conseguir partidas algo más cortas que la competencia. Aunque los shooter tácticos necesitan de ciclos relativamente extensos para que entren en juego variables como la economía, Riot Games le ganó minutos al reloj reduciendo el número total de rondas. Sin embargo, el sistema de empate y desempate introducido por la desarrolladora hace que teóricamente los enfrentamientos puedan llegar a tener una duración infinita.
La partida más larga posible en Valorant
Sin embargo, esta circunstancia teórica que habilita los bucles no puede tiene cabida en la práctica por culpa de un sistema de seguridad de Riot Games. Los servidores de la desarrolladora están preparados de tal forma que, cuando el juego llega a 90 minutos o se acerca peligrosamente a esa cifra, las partidas se detienen automáticamente expulsando a todos los jugadores de los servidores y dando el enfrentamiento por concluido con un empate.
Esta situación ya había aparecido en mitad de un partido competitivo cuando el título daba sus primeros pasos. Sin embargo, hasta ahora la partida más larga de la que teníamos constancia en el modo clasificatoria fue de 1 h y 28 min. Cifra pulverizada por la que ha disputado un jugador que llegó a 1h 29 min y 50 s justo antes de que el servidor colapsara forzando un empate incluso cuando uno de los dos equipos llevaba ventaja en el marcador.
En cuanto a rondas, el enfrentamiento llegó a 51 ciclos completos en los que tuvieron lugar un total de 392 bajas. Fue justo cuando empezaba la ronda número 52 cuando el servidor de Valorant tuvo que cerrarse forzosamente activando el protocolo de seguridad por defecto que evita que los jugadores queden retenidos en partidas ya finalizadas o que se puedan extender artificialmente los tiempos de partida.