League of Legends no se ha sumado a la moda de las colaboraciones entre videojuegos. Riot Games suele defender su propiedad intelectual a capa y espada y, de hecho, ni siquiera ha experimentado haciendo cruces con sus propios títulos que no pertenezcan al universo de Runaterra. Sin embargo, eso nunca ha evitado que la comunidad imagine como sería un crossover del título con otras franquicias.
Esta vez, un artista le ha dado el relevo a Pokémon. Así, ha imaginado como serían todos los campeones que forman el grupo musical K/DA en caso de que fueran entrenadoras de cualquiera de los videojuegos de la franquicia de Nintendo. Un universo alternativo que tiene sus propias normas y en el que Kai’Sa, Akali, Ahri y Evelynn forma como miembros del Alto Mando de la región mientras que Seraphine (que la podéis ver encabezando la entrada) es la entrenadora aspirante.
La estética está más que cuidada, apostando por la línea visual algo más desenfadada de la séptima para transformar las últimas skins de la línea cosmética All Out para darles una nueva vida. Tampoco está nada mal la elección de pokémon para acompañar a cada campeona. Destaca sobretodo la forma Alola de Ninetales acompañando a Ahri, ya que ambas creaciones se inspiran en el mismo ser de la mitología japonesa: el Kumiho. También estuvo muy acertada la elección de Primarina para Seraphine (ambas se basan en la voz).
Algo más sujetas a la interpretación están el resto de elecciones. Hydreigon es una de las criaturas más oscuras de entre los pokémon no legendarios y Evelynn parece una candidata excelente de entre todo el plantel de League of Legends para ser su entrenadora. Kommo-o, con buena velocidad y centrado en la lucha sería el elegido por Akali y para Kai’Sa tenemos un Aurorus que, no os vamos a mentir, no hemos acabado de entender.
Podéis seguir al artista en su cuenta de Twitter o en ArtStation. En ambas tenéis acceso a más creaciones.
Aunque Fiddlesticks tiene una de las habilidades pasivas más absurdas de League of Legends, un jugador logró sacarle partido para engañar a los rivales y completar un backdoor épico jugando al despiste.
