League of Legends puede presumir de ser un juego prácticamente libre de tramposos. Por su propia naturaleza, utilizar programas de terceros para obtener ayudas en partida no es tan útil como en otros títulos y, además, resulta demasiado evidente cuando un jugador los utiliza para sacar ventajas ilegítimas durante las partidas. Una situación que ha llevado a que su incidencia sea menor al 0,5% según los últimos estudios desarrollados por la propia Riot Games.
Sin embargo, un malentendido entre la desarrolladora y un programador casi hace que uno de estos scripts sea totalmente legal. Así lo relataba el propio programador, que utilizó la aplicación de Riot Games para obtener una forma de calcular durante las partidas el daño que podía realizar un personaje. Para esto, tenía en cuenta nuestras propias estadísticas, habilidades y las resistencias del rival ofreciendo respuestas a cuánto tiempo tardaríamos en acabar con él. Información valiosísima e imposible de obtener de forma detallada durante el transcurso de una partida.
Según contaba el creador de este script, lo envío a Riot Games casi como una broma. Sin embargo, dos meses después recibió una suerte de aprobación que finalmente tuvo que ser cancelada de urgencia por la desarrolladora que también esclareció la situación en los foros de la comunidad asegurando que sí permiten este tipo de experimentos, pero que en caso de publicación sería un motivo de baneo permanente en League of Legends.
Este tipo de situaciones, aunque no con tantos malentendidos, son habituales en los juegos multijugador. De hecho, multitud de desarrolladoras tienen cuentas disponibles en HackerOne en las que ofrecen recompensas a los programadores que logren romper las normas y se lo comuniquen en lugar de utilizarlas para lucrarse de forma ilegítima y arruinar el sistema de juego. Una forma de defenderse, simplemente, haciendo que League of Legends ofrezca alternativas legales más interesantes.
Fuente
Aunque han pasado años desde el rework de Quinn, muchos jugadores echan de menos recuperar la posibilidad de controlar a Valor, su águila. Una de las señas de identidad de la campeona que ha desaparecido por completo de League of Legends.
