Una de las críticas más habituales a Riot Games por su gestión de League of Legends es la relacionada con el supuesto abandono de los antiguos campeones. Según muchos jugadores es el momento de que comiencen a revisar su pasado en lugar de seguir lanzando nuevos personajes, pero parece que la desarrolladora no tiene intención de reducir la cadencia de estrenos en la Grieta del Invocador.
Sin embargo, a lo largo de la pasada semana Riot sorprendió a la comunidad presentando un pequeño rework para Rammus. El armadillo de League of Legends iba a recibir una actualización en su definitiva que parecía suficiente para adaptarle a los nuevos tiempos y que abría una nueva forma de trabajar que bien podría considerarse un término medio entre lo que la comunidad quiere y lo que el juego necesita.
La lógica invitaba a pensar, eso sí, que el hecho de que Rammus recibiera una actualización de este tipo imposibilitaba que recibiera un rework en el futuro. Algo que han descartado desde la desarrolladora que insiste en que pese a este cambio el campeón no queda descartado para una futura actualización visual y de gameplay tan profunda como las que han recibido Fiddlesticks y Volibear a lo largo del pasado año.
El movimiento de Riot parece enfocado a la resolución de un problema que se había tornado urgente. El armadillo llevaba en la lista de posibles reworks desde el año 2016 y este era el momento de darle solución a algunos de sus problemas más evidentes en League of Legends. A buen seguro habrá perdido prioridad frente a campeones como Skarner o Shyvana, que están en la última votación disponible, pero no por ello se van a olvidar de Rammus.
De momento no hay fecha estimada para la llegada de este renovado armadillo. El juego está a punto de recibir a Viego y comenzar uno de los eventos más importantes de su historia, por lo que tampoco estaremos faltos de novedades.