Si hay que hablar de jóvenes prodigios de los deportes electrónicos, es de justicia poner en primera plana el nombre de Elias “Jamppi” Olkkonen. Este jugador finlandés de 19 años tuvo una fugaz carrera en Counter-Strike hasta que a finales del pasado año 2019 recibió una sanción indefinida por parte de Valve. El motivo del baneo, que le impide jugar Majors y bloquea de facto su carrera en el shooter, ha causado revuelo en la comunidad al ser considerado uno de los más injustos de la historia.
Jamppi tiene una sanción VAC en una de sus cuentas, sin embargo, el finlandés no es ningún tramposo. El jugador la compró para su amigo con la intención de jugar un evento LAN local cuando apenas tenía 15 años. Una situación que fue descubierta cuatro años más tarde y que supuso una sanción lógica en primer término, pero que resulta completamente ridícula si tenemos en cuenta que tanto Valve como la justicia de su país han convenido que, efectivamente, la cuenta fue traspasada y el jugador nunca llegó a utilizar trampas.
Teniendo en cuenta los hechos probados y aceptados, el “terrible crimen” cometido por Jammpi es saltarse los términos y condiciones de servicio de Steam cuando tenía 15 años. Algo que a Valve parece importarle entre poco y nada, ya que jamás se ha planteado quitarle la sanción por mucha insistencia que el jugador ha mostrado en demostrar su insistencia y pelear contra lo que es, en la práctica, un ejercicio de tiranía.
Ahora, según un tabloide finlandés llamado Ilta-Sanomat, el jugador estaría considerando dar el salto a VALORANT para tener la oportunidad de demostrar lo que podría haber sido. Un movimiento en el que la única sorpresa es que haya tardado tanto y que nos traería a las competiciones de Riot Games a un jugador joven que aspiraría a estar entre los mejores de Europa desde el mismo día que emprenda la transición, si es que acaba confirmándose.