Ghost of Tsushima, tiene lugar en 1274 en la japonesa Isla de Tsushima, al comienzo de la primera invasión mongola. Una de las atracciones del juego es que utiliza eventos históricos reales como punto de partida (aunque no en el desempeño de Jin). Salvo que seas todo un experto en historia o geografía de Japón, es poco probable que este paraje te resulte familiar.
Tsushima en el mundo real
Ahora ya sabéis lo básico de Ghost of Tsushima: Su localización, el contexto histórico y la realidad que hay tras las premisas jugables. Sin embargo, todavía desconocemos muchas cosas de Japón. El país asiático cuenta con más de 6.000 islas, y Tsushima es la octava en extensión. No se trata de un rincón perdido del mundo si no de un enclave de relevancia capital para conocer su historia. Podemos esperar un clima templado, un paraje montañoso y un área de aproximadamente 708.61 Km² representados a escala y con ciertas libertades creativas.
El paraje ocupa una posición estratégica en el Estrecho de Corea. Un emplazamiento geográfico de elevado interés y una zona de conflicto asegurada. El punto intermedio entre Japón y la zona continental de Asia. Parada obligada para los barcos comerciantes y los que tenían intenciones más oscuras. No hace falta estar curtido en estrategia militar para darse cuenta de la importancia de este territorio marítimo. Con solo 80 samuráis acometiendo una imposible defensa, la invasión terminó llegando en 1274. Las hostilidades, como siempre, las sufrió la población civil. Jin, nuestro protagonista, fue uno de los pocos supervivientes.
Aun así, todavía hay un extra. La Isla fue invadida por segunda vez en 1281, por lo que quizás podamos esperar una secuela del título.
Biomas y lugares en juego
Por el momento, no se conoce el mapa global de la Isla de Tsushima. Los mapas modernos solo sirven para dar una idea general de la forma de la isla en el mejor de los casos. El entorno del juego no persigue un realismo extremo, algo que los desarrolladores han aprovechado para introducir todo tipo de biomas de elementos típicos de Japón. Tampoco parece que sean licencias creativas descabelladas.
Además de los muchos campamentos, puertos y fortalezas en los territorios ocupados por la horda mongol, la isla tiene un encanto poético con sus bosques de coníferas o de bambú, campos de flores y hasta montañas nevadas que deberán ser escaladas. La lucha tendrá lugar en pueblos y castillos, pero también en parajes naturales que dejarán escenas memorables. Además, habrá altares secretos en todas partes esperando ser descubiertos.
El clima será dinámico. Habrá ciclos de día y noche y se esperan también lluvias o tormentas. Aun así, como es habitual, tendremos determinados momentos del juego en el que el clima estará preparado para potenciar la sensación de atraparnos en la historia. Además, se espera que la Isla de Tsushima también vaya cambiando dependiendo de nuestras acciones o los eventos del juego. Las columnas de humo que indican batallas o persona en apuros deberían tener un peso real en nuestro entorno.