Han hecho falta unos cuantos días para que Blizzard reaccionara institucionalmente a todo el ruido que levantaron las palabras de Chung "blitzchung" Ng Wai respecto a las protestas en Hong Kong contra China y las posteriores sanciones tanto al jugador de Hearthstone como a los comentaristas de su partida. J. Allen Brack ha lanzado un comunicado en el que anuncia una reducción en las sanciones y la devolución de los premios económicos a blitzchung.
De la misma forma, el texto habla de los valores de Blizzard, los cuales han sido puestos en tela de juicio incluso por propios trabajadores de la compañía. El presidente afirma que ese "todas las voces importan" se aplica en este mismo caso en el que se sanciona a un jugador por lanzar un mensaje político.
Lo importante para Blizzard es la competición
En las primeras líneas se habla de cómo la visión de la compañía es "unir al mundo a través de un entretenimiento épico" y de que los programas de esports han de ceñirse a eso: reunir al planeta usando el entretenimiento, celebrar a los jugadores y construir una comunidad diversa e inclusiva. Unos esports que considera Brack que existen para "crear oportunidades para jugadores de todo el mundo, de distintas culturas, y reunirlos para competir y compartir su pasión por los videojuegos".
A partir de aquí, el texto repasa en tres puntos cómo han afectado estos valores a la situación vista en Hearthstone Grandmasters, deteníendose en lo que significa para ellos una emisión de un torneo, en cuál es el papel de los comentaristas y si el contenido del mensaje de blitzchung fue relevante a la hora de determinar la sanción. Vamos punto por punto.
En el primero de ellos se traslada el popular "no hay que mezclar deporte y política" a los deportes electrónicos. Se afirma que el uso de esas entrevistas para hablar de cosas distintas a la competición es una violación de las reglas dispuestas en Hearthstone Grandmasters, algo que el propio jugador conocía antes de hacer dichas declaraciones.
"Todas las voces importan" es uno de los lemas de Blizzard, el cual Brack dice que se aplica a la comunidad, pero no a una emisión oficial que debe estar centrada en lo que sucede en el torneo y en "ser un lugar donde todos sean bienvenidos". Esto va en consonancia con ese "extra" en el texto chino de la sanción a blitzchung que hablaba de "defender el orgullo de China"
El segundo punto es muy breve y hace referencia a los comentaristas. Estos fueron sancionados de igual manera que el jugador de Hong Kong, presumiblemente por unas risas nerviosas al ver venir la polémica que estamos viviendo en estos momentos y por no cortar a blitzchung: "Contratamos comentaristas para elevar la pasión por el juego. Aumentan la visibilidad y ayudan a que la experiencia de ver esports se centre en el torneo y nuestros jugadores".
Aunque el punto más extenso es el tercero y último, el que habla sobre el contenido del mensaje de blitzchung. Aquí es donde encontramos una de las frases más categóricas del texto: "Las visiones específicas expresadas por blitzchung NO fueron un factor en nuestra decisión. Quiero ser claro: nuestras relaciones en China no han tenido influencia en nuestra decisión".
Rebaja en las sanciones
Con esto sobre la mesa, el presidente de Blizzard pasa a un apartado de autocrítica con el que cierra el comunicado y que comienza relatando una realidad, que muchos jugadores, comentaristas, jugadores y fans han tenido quejas sobre cómo ha manejado la situación la compañía. "Hemos reaccionado demasiado rápido", comenta J. Allen Brack.
Tras esto, habla de que blitzchung ganó sus partidas en buena lid y que al tratarse de una sanción "extradeportiva" es legítimo que el jugador reciba sus premios, los cuales se le devolverán. De la misma manera, se cuenta que la prohibición de que participe en la competición pasa de un año a seis meses, al igual que los comentaristas.
Muchos empleados se muestran disconformes y consideran que la decisión atenta contra varios de los principios que la compañía parecía defender en los últimos tiempos.
