Entre tanto rebumbio con las novedades de League of Legends, es fácil olvidarse de cuál es exactamente la situación actual del juego. Pensamos en el lanzamiento de Bel’Veth o en el gigantesco próximo parche en el que llegará la reducción del daño efectivo. Sin embargo, elevar la vista hacia el horizonte puede hacer que nos perdamos lo que tenemos justo en frente de nuestras narices. En este caso lo que se sitúa delante de nosotros es una oportunidad como pocas de ganar partidas clasificatorias gracias al que ya es el campeón más roto de toda la Temporada 12.
El nuevo Olaf domina League of Legends
El campeón en cuestión es Olaf, un viejo conocido del carril superior. Aunque la gran actualización propuesta por Riot Games era la de modernizar su kit y tratar de mejorar sus problemas de equilibrio, la desarrolladora ha acabado por introducir una mejora inmensa cuya traducción es el aumento de casi ocho puntos porcentuales en su tasa de victoria cuando se utiliza en la Top Lane. En esta posición gana un 53,6% de las partidas lo que, a efectos prácticos, le convierte en el mejor campeón de todo League of Legends si tenemos en cuenta toda la distribución de rangos.
Sin embargo, todavía hay más magia escondida en el personaje. Este porcentaje de victorias tiene en cuenta todas las elecciones de objetos posibles. Sin embargo, la mayoría de los jugadores está cometiendo un error a la hora de elegir ítems. Cuando equipamos al campeón con la Fuerza de la Trinidad, su tasa media de triunfos asciende al 57,6%. Una verdadera barbaridad que casi no hemos visto en la historia del League of Legends moderno. Hay que tener en cuenta que, en términos generales, los campeones más rotos que han pisado la Grieta del Invocador ganaban un 60% de los enfrentamientos.
Las mayores posibilidades de supervivencia que ofrece su nueva W (Aguante) y su mejor distribución de poder a lo largo de la partida han permitido al campeón asentarse como el más poderoso del videojuego con mucha diferencia sobre sus perseguidores. Lo cierto es que el kit está muy bien construido en la actualidad, aunque lo que pasa factura por encima de todo es el hecho de que sus estadísticas de daño están demasiado desequilibradas, de modo que sea casi imposible ganar un intercambio contra él. Da igual a que se enfrente, que probablemente ganará.
Quizás penséis que la historia acaba aquí y es una mera advertencia de “juégalo o banealo”, pero todavía queda un detalle por mencionar cuando se trata de Olaf. El campeón no es solo el más poderoso de League of Legends, si no que promete mejorar cuando llegue el próximo gran parche 12.10. La reducción de daño beneficiará a los tiradores, contra los que se desempeña muy bien. No obstante, lo que marcará la diferencia es el hecho de contar con todo lo que Riot Games piensa que será demasiado poderoso. Tiene daño verdadero, un escudo, robo de vida y una capacidad de DPS muy elevada gracias al escaso enfriamiento de su Q (Lanzamiento).
Lo cierto es que, en caso de que salga tan beneficiado como parece, Riot Games podría nerfearlo de forma inminente. La desarrolladora ha anunciado que no hará ajustes de equilibrio individuales en el parche 12.10 (más allá de las curaciones o escudos) pero también que llevará a cabo ajustes apenas 48 después de su lanzamiento. Es posible que Olaf caiga entonces, aunque no será nada fácil. El campeón brilla en el carril superior, pero su desempeño en la jungla no está a la altura y el equipo de equilibrio tendrá que buscar un nerf más ingeniosos que los nerfs convencionales.