Me encantan los juegos de From Software, pero lo que es cierto es que, una pequeña parte de la comunidad, destila un aire de prepotencia que me da bastante pereza. Lo he visto con títulos anteriores del estudio, y está volviendo a aflorar con Elden Ring. Aquellos adalides de un estilo que quieren amargar a los demás tratando de imponer cómo se debe jugar. Qué es lo ético o no a la hora de tratar de sobrevivir en un universo en el que los creadores tratan de hacernos la mayor putada posible; y parece que no es ético que intentemos devolvérsela o vencer a los bosses de la forma en la que sea. Como si no valiese todo en la batalla y solo fuese digno hacerlo sin usar viales de recuperación y con nuestro personaje usando palos o piedras.
Me aburre soberanamente todo ese aparente perfeccionismo. Creo que hay que respetar que cada uno juegue como quiera, pero en el momento en el que alguien trata de imponer un estilo e intenta dar lecciones por redes sociales de cómo jugar o de que se proclama como mejor que tú porque se le ha dado mejor, es cuando estamos llegando a un punto que bordea lo ridículo. De hecho, hace poco compartí en redes un vídeo de un boss al que, a mi juicio, maté de forma épica, y un señor que ni me sigue ni conozco de nada vino a ponerse medallitas por hacer un "casi no-hit" a la primera. Pues un caramelito para ti, crack.
Diría que solo es una pequeña parte de la comunidad de los juegos souls-like, pero no puedo evitar que me molesta bastante leer algunos de esos comentarios cargados de prepotencia y superioridad moral. Quizás para paliar algún complejo de su vida, tienen que ir dando lecciones de cómo se juega. En estos casos, empatizo bastante con las mujeres que les toca aguantar la condescendencia de algunos al jugar a títulos como WoW o Valorant, cuando probablemente ellas estén más que capacitadas para darles un repaso en cualquier partida.
Que cada uno juegue como le de la gana
A lo que voy con esto es que, como dice el meme, dejad que la gente disfrute como quiera de los juegos. Sí a ti te gusta ponerte una aventura a la máxima dificultad porque crees que así la experiencia es más óptima y duradera, adelante. Pero eso no te hace mejor que quienes lo completan en nivel fácil por, simplemente, llegar hasta el final de la historia. No a todo el mundo le gusta explorar al máximo los juegos o sacar todos los logros y trofeos. Afortunadamente, los videojuegos ofrecen experiencias para todo tipo de paladares y para que todos la aprovechen a su manera.
Afortunadamente, la mayoría de la comunidad de los juegos de From Software no cumple este patrón, y por lo general, son muy colaborativos. Esto podemos verlo al invocar para tener una ayudita extra en los combates más complicados del juego. Y también en las comunidades que se generan alrededor, como foros y redes sociales, donde no dudan en ayudarse, aconsejar o compartir descubrimientos, formando una experiencia muy bonita sobre los caminos tan diferentes que tomamos en el juego; especialmente en un mundo tan abierto como Elden Ring.
Disfruto el cooperativo como un cochino en una charca
Así que, lo siento gitgudders, pero os debo decir que estoy jugando algunos momentos en cooperativo a Elden Ring con mi compañero Razablan, y lo estoy disfrutando muchísimo. Él se pasó el juego con premura para llegar a publicar el análisis a tiempo, así que está compartiendo sus conocimientos conmigo, y ayudándome a llegar al final con más rapidez. Y eso también es parte de la experiencia de los juegos de From Software.
Me ha llevado por zonas que no podría ni pisar debido a mi nivel, así que por momentos he sido espectador de lujo mientras él machacaba enemigos con magias y ataques poderosísimos. Aunque intentaba aportar mi granito de arena dando algún katanazo que algún arañazo superficial hacía a los bosses. De hecho, nos enfrentamos a un caballero que nos dio mucha guerra, e intentamos bastantes tretas para vencerlo. La cosa iba mal y mi compañero murió en un ataque a la desesperada. Pero dejó al enemigo a un solo golpe de vida. Así que tuve que acudir raudo, ya que mis posibilidades eran mínimas. Estaba tan por debajo del nivel que tuve que darle dos golpes con mi arma, pero conseguimos vencer y unos cuántos miles de runas que nos vinieron bien frescas.
También vino algún tipo a invadirnos. Uno de ellos nos costó sudor y sangre. No lo derrotamos, pero se fue por patas cuando le dejamos prácticamente noqueado. E intentó atraernos hasta el boss mencionado anteriormente, en un intento desesperado por salvarse. Pero nos sentamos tan ricamente a ver cómo abandonaba nuestro mundo. En apenas unas horas se generaron un montón de anécdotas divertidas evidenciando que Elden Ring es divertidísimo también en compañía.
Lo que quiero decir con esto es que he disfrutado muchísimo de la experiencia de jugar en compañía a Elden Ring. Y no volveré en hacerlo de nuevo cuando nos apetezca. También invocaré a alguien si lo veo necesario contra un boss, porque no quiero frustrarme demasiado jugando, ya que no tengo mucho tiempo como para pasarme semanas estancado. No por ello soy peor jugador que nadie, ni lo disfruto menos. Lo hago a mi manera. Tú a la tuya. Y así nos vale a todos para tener una experiencia óptima, pero sin pretender que la nuestra quede por encima de la otra. Vive y deja vivir.