Los jugadores de League of Legends cometemos errores de forma constante. Independientemente del MMR en el que estemos es normal que fallemos minions, demos un mal paso en una pelea o seamos cazados por los rivales. La mayor parte de los fallos tienen como consecuencia un castigo que los hace evidentes. Sin embargo, hay uno que se comete constantemente en todos los rangos del juego y del que no es consciente la mayoría de la comunidad: el de las oportunidades desaprovechadas.
Una lección de Faker que te hará mejorar al instante
En una de las últimas retransmisiones en directo llevadas a cabo por Faker, el jugador dio una lección sobre lo importante que es aprovechar cada una de las oportunidades que nos ofrece una partida de League of Legends. Lo hizo mientras entrenaba la Kai’Sa medio que después utilizaría en competitivo. En la partida en cuestión, utilizó un Destello hiperagresivo para acabar con la LeBlanc rival aprovechando un espacio que apenas duraría unos segundos y que le evitó una partida infernal.
Además de llevar a cabo un intercambio perfecto durante el primer nivel de la partida, vemos como Faker comienza a ganar una posición de presión instantes antes de subir a nivel dos. Justo después combina el lanzamiento de la W (Buscador del Vacío) con el Destello, la Q (Lluvia de Icathia) y el Prender para vaciar la mitad restante de la barra de vida de LeBlanc. La jugada está calculada al milímetro y el rival cae con la última instancia de daño del Prender.
Lejos de ser una genialidad mecánica, la jugada está al alcance de casi cualquier jugador de League of Legends que tenga la experiencia suficiente y la mayor diferencia entre lo que hace Faker y lo que haría un mal jugador está en los aspectos de atrevimiento y conocimiento. Los jugadores de League of Legends dedicamos muy poco tiempo a calcular daños y por ello desaprovechamos muchos de los momentos clave que se nos presentan, siendo esta una de las mayores diferencias entre los genios del juego y los que estamos atrapados en oro.
Muchas veces pensamos que todo es cuestión de mecánicas, pero una parte de que seamos malos jugadores (siempre en comparación con el nivel de élite) se debe a que no hemos dedicado el tiempo suficiente a saber como funciona realmente el juego. Probablemente no te hayas parado nunca a sumar el daño de todas tus habilidades en el primer nivel, y eso te hace perder oportunidades como las que sí aprovecha Faker.