Los campeones de League of Legends siempre han tenido que cumplir un requisito para ser considerados como posibles lanzamientos. Cada uno de ellos debe de ser diferente y aportar algo significativo al plantel de personajes. Es una filosofía que Riot Games siempre ha tenido en cuenta y muy agradecida por la comunidad. Sin embargo, no todas las diferencias están en las habilidades o su aspecto. En muy pocas ocasiones, los desarrolladores encuentran algo que ni ellos mismos esperaban.
El campeón de League of Legends con el que siempre mejoramos
Uno de los ejemplos paradigmáticos es Yasuo. El campeón representa el choque cultural siendo el que más opiniones enfrentadas genera entre las comunidades de diferentes servidores. Sin embargo, esa no es su única anomalía y ni siquiera la más grande. Lo que Riot Games considera verdaderamente raro es el funcionamiento de su curva de maestría, ya que según los datos que manejan en la compañía, es el único campeón de League of Legends con el que podemos subir nuestro MMR de forma teóricamente infinita.
La curva de maestría es una de las estadísticas más interseantes, pero solo Riot Games tiene acceso a ella. Esta expresa de forma visual cuánto mejora la tasa de victorias de un personaje en función a las partidas que un jugador le dedica. La mayoría de ellas sigue la misma forma: empieza desde un punto relativamente bajo determinado en función al poder y la dificultad del campeón, ascendiendo progresivamente hasta un límite a partir del cual se mantiene estable de forma indefinida. Normalmente a este punto se llega una vez hemos jugado entre 30 y 100 partidas con él.
El significado cuando la curva se convierte en línea recta es que debemos mejorar en términos generales para seguir subiendo, ya que nuestro dominio del personaje ha pasado a ser irrelevante. Yasuo es el único campeón de League of Legends que incumple esta norma. Independientemente del número de partidas disputadas con el personaje, la curva de maestría siempre mantiene una tendencia creciente. Cada vez que jugamos con él aprendemos algo nuevo, incluso si ya lo habíamos elegido 150 veces.
Esta situación está en parte motivada por el hecho de que sea uno de los campeones más populares de League of Legends, lo que facilita mucho conseguir información entre los jugadores que le dedican tantas partidas. Sin embargo, ni siquiera algunos de los más escogidos como Ezreal o Lux pueden competir con el samurái. Algo que deberíamos considerar antes de pensar que es un campeón demasiado fácil o poderoso. Quizá detrás del Yasuo que estropea tu partida clasificatoria haya cientos de horas de entrenamiento.