Los pequeños fallos de League of Legends son algunos de los que más tiempo permanecen en el título. Desajustes que apenas entorpecen la experiencia, pero que de tanto verlos acaban siendo algunos de los más desesperantes del juego. Uno de los ejemplos de actualidad estaba en la fase de selección de campeón que, sistemáticamente, forzaba a algunos jugadores a ser los primeros en elegir en casi todas las partidas. Este fallo ya forma parte del pasado del título. Sin embargo, ha dado lugar a una pregunta: ¿por qué tardaron tanto en arreglar algo tan fácil de solucionar?
La lección de un desarrollador sobre League of Legends
Lejos de ofenderse por la cuestión planteada por los jugadores, uno de los desarrolladores de League of Legends aprovechó para explicar por qué la compañía puede tardar tanto en reaccionar. Aclarando en primer lugar que no se trata de desconocimiento o de una forma de ignorar las sugerencias, este trabajador de Riot Games ofreció una explicación tremendamente extensa en la que enfrentó la perspectiva de la comunidad con la realidad de trabajar en una desarrolladora de semejante tamaño.
Aunque está claro que Riot Games cuenta con una cantidad de recursos que ya quisieran muchas compañías, esto se debe a la existencia de una base de jugadores muy elevada que también genera problemas adicionales que surgen a diario. Los desarrolladores trabajan de forma prioritaria resolviendo los fallos en función a la cantidad de jugadores afectados y su gravedad. De este modo, es normal que la actividad diaria requiera pequeños ajustes más urgentes o grandes planes que no deben retrasarse.
Cuando este desarrollador resume la situación en un dilema sencillo, es fácil ponerse en sus zapatos y darse cuenta de que todos actuaríamos exactamente de la misma forma: “¿Debo destinar mis recursos en hacer mejor algo que un 1% de los jugadores apreciarán pero no tendrá impacto en su capacidad de jugar o sería mejor utilizarlos para solucionar un problema que impide al 1% de la comunidad utilizar el juego cuando la carga es demasiado alta?”.
Esta situación incluso genera cierta frustración en los desarrolladores, que no siempre puede utilizar su tiempo de la forma que les gustaría para mejorar el juego y a veces tienen que hacer las cosas que deben solucionarse con urgencia. De hecho, es cuando estas situaciones se cruzan con las pequeñas áreas de mejora cuando suelen llevarlas a cabo, como sucedió en el caso de la selección de campeón: todo era cuestión de tomar un pequeño desvío en su trabajo y solucionarlo en un tiempo aceptable para seguir rápidamente con el plan inicial.
Riot Games está tan estructurada como una desarrolladora puede estarlo, de modo que todos sus departamentos trabajan de forma paralela y en muchos de ellos es imposible intercambiar trabajadores. Los ingenieros que se centran en la base del código de League of Legends no son los mismos que desarrollan a los personajes y algunos de los artistas que crean skins pueden no pasar de las nociones básicas de programación. Tampoco es una solución simplemente fichar a más miembros para el equipo, debido al rendimiento decreciente que tendría cada nueva adición una vez llegado al tope de productividad.
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