Aunque quizás no lo relacionéis, estoy seguro de que en algún momento habéis visto algún cuadro de Jackson Pollock. El artista norteamericano ha sido una de las figuras más importantes del expresionismo abstracto, y máximo exponente de ese estilo de pintura que comúnmente se llama "chorrear pintura".
Las mofas entre el nutrido grupo de los ateos del arte abstracto sobre Pollock y sus cuadros, los cuales creen que "podría hacerlos un niño", fueron deslegitimadas hace unos años por una corriente académica que buscaba analizar los fractales de los cuadros. Esto alumbró un software que lograba diferenciar los cuadros de imitadores de los que realmente habían sido hechos por Pollock.
De esa forma, podemos ver claro que había un método detrás de la obra del pintor, e incluso que había matemática detrás de ellos. Quizás por eso, tiene sentido que muchos años después de la muerte de Pollock, una gráfica usada por Riot Games para evaluar el estado de sus campeones de League of Legends sea bastante similar. Al final, todo son matemáticas.
Breath vs Depth, la gráfica clave de los campeones
Estamos hablando de unas gráficas muy concretas, y que Riot Games ha tenido que usar desde hace un tiempo a causa de la enorme cantidad de personajes distintos que hay en League of Legends. Cada caso individual es complejo de evaluar sólo con los números, pero si todos estos datos se ordenan, la realidad se hace mucho más llevadera.
Son las gráficas llamadas "Breadth vs Depth" (algo así como amplitud vs profundidad), y que representan la cantidad de jugadores que usan a un campeón frente a la cantidad de partidas que juegan estos usuarios con ellos. De esta forma, llegamos a un cuadrado que puede ser dividido en cuatro grandes cuadrantes por las medias de ambas variables: jugado por muchos y muy usado sería popular, jugado por muchos pero pocos encuentros alumbraría la categoría asequible, jugado por pocos pero muchas partidas sería nicho, y finalmente jugado por pocos y en pocas partidas, haría un campeón impopular.
El asunto es que un campeón estaría en un punto determinado del cuadro, por eso la gráfica suele hacerse para medir tendencias y usar datos de varios parches distintos. Si unimos la posición de cada campeón durante esos parches en los que hemos medido la popularidad de los campeones de las dos formas anteriormente comentadas, originamos una línea que nos habla de su cambio a lo largo del tiempo.
Gracias a esto, podemos encuadrar a los campeones en diferentes puntos de juego y generar ese manchurrón de colores que tanto se parece a los cuadros de Jackson Pollock. Y lo cierto es que es una herramienta tremendamente útil para Riot Games.
La vuelta a la relación entre matemáticas y arte
Toda esta información fue contada de primera mano por el rioter Nathan Blau en la última edición de la Game Developers Conference, durante la charla "Data Informed Decisions with the Champions of League of Legends" (Toma de decisiones informada sobre los campeones de League of Legends).
Tal y como cuenta Nathan, gracias a este tipo de gráficas es posible obtener información sobre la popularidad de roles como los ADCs, o de arquetipos visuales como los monstruos. Esta gráfica permite ver cómo está el metajuego de una forma distinta a los pickrates y winrates, así como revisar la filosofía de diseño de los campeones.
Pero lo más interesante de todo, es que esto es incluso una herramienta útil para el diseño mismo, ya que los creadores pueden apuntar a cierta zona de la gráfica antes incluso de arrancar el diseño propiamente dicho. Si vemos que los tiradores no habitan la zona reservada a campeones con una popularidad media a nivel de jugadores, pero con muchas partidas a sus espaldas, quizás sería interesante plantearse crear uno. Y de esa forma, los números vuelven a darse la mano con el arte...Justo al revés de como sucedía con Pollock.