G2 Esports llegó al VCT Masters de Valorant tras una profunda reconstrucción. El equipo no dominaba desde que comenzó el circuito competitivo oficial de Riot Games y tuvo que cambiar a la práctica totalidad de su plantilla. Con Mixwell como único miembro original todavía en el quinteto, han sido capaces de llegar a tiempo al segundo torneo presencial de la historia del shooter. Buen papel de los samuráis que, desafortunadamente, acabó de la forma más dolorosa con una contundente derrota ante Gambit Esports.
Una derrota estrepitosa que no empaña un gran torneo
Tras haber firmado un gran inicio de torneo donde fueron capaces de doblegar a equipos del nivel de Sentinels o KRU Esports y plantando cara en el Breeze que abría la semifinal ante Gambit, a G2 Esports se le apagaron las luces. El conjunto samurái venía de tener buenos resultados en Icebox a lo largo de la competición, pero no fue capaz de anotar ni una sola ronda cuando tocó jugarlo en el duelo decisivo para llegar a la final. Trece a nada para el combinado ruso que mandó a los de Mixwell de vuelta a casa.
Aunque es difícil apartar la vista de la inmediatez y olvidar el marcador final, los muchachos de G2 Esports pueden estar satisfechos con su actuación. El nuevo quinteto comenzó a funcionar el pasado mes de junio, habiendo tenido un tiempo de preparación mucho menor que el de sus rivales. Algo que no ha impedido que por primera vez desde el primitivo First Strike estén en un gran campeonato ni les deja sin opciones de acudir al próximo Valorant Champions y luchar por el título de campeón del mundo.
El viaje de vuelta a casa siempre es más duro tras una partida en la que no funcionaron la precisión ni la estrategia y será difícil digerir el contexto de la eliminación. Sin embargo, tendrán poco tiempo lamiéndose las heridas. El clasificatorio de última oportunidad comienza en menos de un mes, y tendrán que superar a otros siete equipos de la región europea para completar la machada.