Aunque todavía hay muchos jugadores que se preguntan como acceder a la beta de Call of Duty: Vanguard, aquellos que más tiempo llevan probando el nuevo título ya han tenido tiempo de sobra para comenzar a sacar conclusiones con respecto al juego. Una situación que nos ha ofrecido lecturas tanto positivas como negativas y que, sobre todo, ha revelado cuáles serán las grandes amenazas del nuevo CoD para sobrevivir a largo plazo tras su lanzamiento el 5 de noviembre en sistemas Xbox, PlayStation y PC.
El problema que más inquieta a los jugadores
Tratando de mostrar los principales puntos negativos del nuevo Call of Duty, JGOD ha insistido en uno de los cambios más evidentes que habrán percibido los jugadores. Este popular youtuber expresó para su millón de suscriptores las consecuencias que podría tener la modificación del “Time to Kill”. Concepto que hace referencia al tiempo que tardamos en conseguir una baja si acertamos todas nuestras balas en el objetivo.
La nueva entrega tiene uno de los tiempos para conseguir la baja más bajos de la franquicia y se combina con un elevado tiempo de retardo al disparar cuando estamos corriendo. Según la opinión de JGOD esto dará lugar a “estilos de juego limitados” entre los que destacó uno de los más temidos por los jugadores. Los ‘camperos’, tan temidos y odiados, se verán beneficiados por los sistemas haciendo que su pasividad sea la forma correcta de jugar las partidas.
A esta situación se unen otros sistemas como el diseño de los mapas o la opción de conseguir armamento adicional que no incentivan a los jugadores a desplazarse por los escenarios, generando un juego muy pausado que podría pasar mucha factura a los jugadores más dedicados de la saga Call of Duty que, previsiblemente, estarán en contra de estas decisiones de diseño tomadas para favorecer al público algo más ‘casual’ que se anime a probar CoD: Vanguard.