La jungla ha protagonizado las últimas grandes polémicas de League of Legends. Una posición demasiado poderosa que está en una situación paradójica en la que casi nadie quiere jugarla. Ni siquiera las medidas constantes tomadas por Riot Games con respecto a este rol han sido suficientes como para rescatarlo de su impopularidad. El exceso de responsabilidad y la dureza con la que se castigan los errores es suficiente como para evitar que los jugadores quieran exponerse a estar en el centro de atención.
El peligro para los jugadores inexpertos
Uno de los mayores peligros cuando enfrentamos este rol es el de cometer errores en los primeros minutos. Si somos víctimas de una agresión rival imprevista o no estamos prestando atención corremos el riesgo de no detectar a los rivales que quieran hacernos la vida imposible, de forma que será demasiado sencillo acabar cayendo en una trampa que nos condene a no poder ayudar a nuestro equipo en toda la partida con la más que posible derrota que eso supone.
Esta situación fue la que se encontró un jugador inexperto en una partida clasificatoria. Sin demasiado conocimiento de la posición y con una serie de decisiones muy desafortunadas, acabó encontrándose con una invasión constante del equipo enemigo durante los primeros minutos. Así, en una sucesión de hechos de pesadilla para cualquier jugador de League of Legends acostumbrado a la jungla, vio como antes de conseguir su primer campamento habían acabado tres veces con él.
Incluso en los rangos más bajos de League of Legends, los jugadores son conscientes de que la desconexión de un jungla de sus aliados es la clave para conseguir ventajas tempranas. Así, acabaron denegando al rival mediante todo tipo de invasiones para terminar ganando gracias a la ayuda que su propio jugador sí podía brindara a los demás. Todos tenemos malas partidas y estas cosas pueden pasar, especialmente si no conocemos la posición, pero es sin duda una de las sensaciones más desagradables del juego.
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