Pese a la vorágine que ha supuesto el lanzamiento de otros títulos, League of Legends ha sido capaz de mantenerse fuerte e ir atrayendo a nuevos jugadores. Ganarse al público joven es una de las claves del éxito de Riot Games de cara a los próximos diez años y su capacidad para hacerlo determinará si la desarrolladora consigue asentar la idea de producto imperecedero por la que parece apostar. Una posibilidad que, de momento, va cogiendo forma.
El jugador número 101 de un servidor con 14 años
Una de las consecuencias secundarias producto de la llegada de jugadores jóvenes es que, de tanto en cuanto, nos encontramos con verdaderos prodigios del juego que ni siquiera cumplen con la edad mínima para competir. Uno de ellos es Gryffinn, quien ha abierto un preguntas y respuestas con la comunidad después de haber llegado a los 1.000 puntos de liga en Challenger con apenas 14 años. Un logro que le sitúa como el jugador número 101 de todo el servidor de Norteamérica.
En su discusión con la comunidad, el jugador explicaba que estaba ante un aniversario un tanto especial. Cerca de un año atrás ya obtuvo cierto protagonismo al alcanzar el rango clasificatorio más alto de League of Legends con solo 13 años. Una progresión que no ha parado desde entonces y que se ha vuelto mucho más interesante ahora que solo le falta un año para poder competir en el circuito semiprofesional de Norteamérica y que hace evidente una progresión que parece imparable.
En las preguntas el jugador ha ido resolviendo diferentes curiosidades de la comunidad sobre el juego. Por ejemplo, sabemos que comenzó a jugar cuando apenas tenía siete años y que durante esas primeras etapas no le podía dedicar demasiadas horas. Asegura también que tiene un buen rendimiento académico sobre el que se considera “afortunado” al no tener que “dedicar demasiadas horas” para cumplir con las obligaciones propias de un adolescente. Además, ha asegurado que los dragones están muy sobrevalorados en League of Legends, dando su opinión también sobre otros aspectos y situandose en la línea de opinión de otros grandes jugadores.
Viendo sus actuaciones en partidas clasificatorias, no es difícil adivinar que su objetivo es llegar a ser profesional. Una carrera sacrificada que incluye largas sesiones de entrenamiento y que de momento se corta ante la dificultad para encontrar oportunidades verdaderamente competitivas hasta que cumpla la edad mínima exigida por Riot Games a los jugadores para entrar al alto nivel. Sin embargo, asegura que en cuanto cumpla los 15 años, podrá jugar a nivel amateur para seguir curtiéndose hasta dar su próximo salto.
Aunque pueda parecer un caso único, se queda en lo excepcional. Otros jugadores de edades similares están haciéndose un hueco en los máximos escalones de los rangos más elevados de League of Legends apuntando a un futuro prometedor. Habrá que ver cuantos se quedan por el camino o pierden el interés, sin embargo estamos ante un curioso fenómeno que comienza en el juego de Riot Games.