A lo largo de la historia competitiva de League of Legends, han sido pocas las mujeres que han conseguido llegar a la élite. Exceptuando el caso de Vaevictis, Remilia es una de las pocas referentes femeninas que ha logrado éxito sobre el escenario. Sin embargo, cada vez está más cerca el día donde dejemos de hacer noticia que una mujer acuda el MSI en calidad de suplente para acercarnos a un nuevo debut en las más altas instancias del juego profesional.
Uno de los mayores pasos a este respecto lo ha dado el League of Legends brasileño, donde el cuatro de los diez equipos de la liga han apostado por plantillas mixtas para sus conjuntos academia. Una distribución que dará lugar a un total de cinco jugadoras repartidas en cuatro de los equipos que cuentan con una plaza en la competición. No todas partirán desde la posición de titulares, pero habrá más que nunca en esta condición. Está asegurada la presencia de Harumi como support de Rensga, Lawi en la posición de apoyo en Miners y Liz como jungla titular de LOUD Academy. Por otra parte, tendremos otras dos jugadoras (Ari y Yatsu) que tendrán que esperar su oportunidad desde el banquillo.
El movimiento ha sido bien recibido por la comunidad, especialmente en el caso de Liz, que hizo un buen papel durante la temporada de primavera de la liga de academias cuando partió desde la posición de suplente del equipo para ayudarles en el tramo final de temporada, concluyendo esta con un top cuatro en la fase regular y una derrota ajustada contra Pain Gaming en los playoffs que acabó siendo el ganador de la competición.
Pese a lo positivo de la situación, es pronto para echar las campanas al vuelo. Mayumi dio este paso hace ya unos años, pero terminó denunciando al que era su club (INTZ) debido a irregularidades en su contrato. Incluso acusó a la organización de “maximizar beneficios explotando su imagen” para terminar “convirtiéndola en una chica florero a la que solo llamaban para acciones de publicidad aprovechándose de su edad y género”. La jugadora también tuvo que aguantar los comentarios despectivos de otros jugadores profesionales.