La CR-56 AMAX está siendo apuñalada por Raven Software sin parar y sin que nadie entienda los motivos. Las armas de Modern Warfare, en principio, ya quedaron bien balanceadas en el momento en el que Infinity Ward dejó de estar al cargo de Call of Duty Warzone. De hecho, no ha habido ninguna que haya recibido cambios demasiado sustanciales desde la llegada de Black Ops Cold War, ni siquiera la misma MP5 que actualmente está volviendo a ser una de las más vistas en el campo de batalla.
Sin embargo, después de varios ajustes en las armas más poderosas de la Guerra Fría, como la FFAR1 o la AUG en su momento, Raven tomó la decisión de nerfear la CR-56 AMAX debido a que estaba siendo más usada que otras armas de Treyarch, y eso no podía ser porque, claro, no invita a pasar por caja para comprarse Black Ops Cold War.
Después de un primer nerfeo, ayer mismo la compañía volvió a aplicar otra bajada de potencia al fusil de asalto del juego protagonizado por el Capitán Price por sorpresa. Lo que se retocó, no obstante, no ha sido suficiente y el arma continúa teniendo una buenísima potencia. Vaya, que a efectos prácticos es como si no se hubiera tocado nada porque únicamente hace referencia a las balas que impactamos en la cabeza.
- El multiplicador de disparos a la cabeza se redujo de 1,62 a 1,5.
Como podéis ver en el vídeo que os hemos dejado en la parte superior de estas líneas, el mismo Kesto explica que apenas es un cambio destacable porque al final solo afecta a situaciones muy concretas y no siempre. Por lo que Raven deberá continuar esforzándose para que la CR-56 AMAX deje de ser ahora mismo meta y se convierta en una de las armas menos usadas del juego, en vez de ser una de las principales.