Los últimos estrenos de campeones llegaron a League of Legends entre polémica. Aunque en términos generales y con la excepción de Seraphine la comunidad valoró positivamente la creatividad en cuanto a los kits de habilidades y el funcionamiento de los personajes, muchos de los diseños han sido duramente criticados. El motivo es muy siempre: en los últimos años casi todos los nuevos héroes que llegan al juego comparten rasgos humanoides y la comunidad piensa que Riot Games se ha quedado sin imaginación.
Desde la desarrolladora han aguantado estoicamente las críticas. Sin embargo, han aprovechado el último blog de desarrollo del título para dar su versión de lo que ha pasado con los nuevos campeones de League of Legends. Así, además de hacer alusión al ya conocido argumento de que los personajes con formas humanas son más populares y la imperiosa necesidad de que lo sean, han asegurado que ha habido un cambio en las fuentes de inspiración a la hora de crearlos.
Según Riot, recientemente han querido “aumentar la representatividad de los campeones”. Una práctica que han llevado a cabo a lo largo del “último par de años”, haciendo que cada vez haya “más campeones inspirados por diferentes culturas a lo largo del mundo”. Un esfuerzo que según la desarrolladora se ha hecho para “permitir que todos los jugadores sean capaces de verse a sí mismos en el juego al que juegan sin que League of Legends sea una excepción”. Así, por ejemplo, se creó Samira en referencia a la cultura persa o Viego inspirado en los conquistadores españoles.
El problema es que para reflejar estas culturas, la desarrolladora no ha conseguido una estrategia más fiable que recurrir a formas humanoides. No obstante, se han reafirmado a compaginar este nuevo designio creativo de League of Legends con una mayor presencia de criaturas que nada tengan que ver con nuestra especie. Una suerte de término medio donde el principal estreno será el de un monstruo durante el próximo año 2022.