¿Os acordáis de la mítica saga Driver? Nació en la PlayStation original como uno de los juegos de conducción más populares de la época, llevándonos por espectaculares persecuciones y carreras por la ciudad. Con ese concepto iba a nacer la saga Watch Dogs, con Ubisoft liderando un reinicio; pero a poco de comenzar a desarrollarlo decidieron que querían hacer su propio GTA.
Una fuente procedente de Ubisoft ha querido contar cómo fue el proceso del primer Watch Dogs, que llegó a las tiendas en 2014. Iba a ser un reinicio ambicioso de la saga Driver, que tuvo varias entregas a comienzos de los 2000. Pero en Ubisoft comenzaron a añadir numerosos elementos nuevos y parecía más que un simple juego de conducción; por eso acabó convirtiéndose en un sandbox propio, añadiendo la temática del hackeo, muy popular hace unos años.
Este reinicio de Driver nació sobre 2011, cuando se estaba desarrollando Driver: San Francisco de la mano de Ubisoft Reflections tras la adquisición por parte de la firma gala del estudio que hizo nacer la saga Driver. Pero la filial de Ubisoft en Montreal entró con fuerza para tomar las riendas, queriendo dar una vuelta de tuerca que diera la sensación de reinicio, aunque manteniendo el espíritu.
Pero la ambición "se les fue de las manos" y así nació el Watch Dogs que todos conocemos, protagonizado por Aiden Pearce, y que nos deja una ciudad al completo para realizar misiones al estilo GTA, con la peculiaridad de poder hackear a los habitantes de la urbe o a los dispositivos electrónicos como los semáforos, pantallas o cámaras de seguridad.
La saga Watch Dogs ya lleva tres entregas y la última ha llegado a las tiendas con Watch Dogs Legion, una propuesta revolucionaria que nos permite tomar el control de distintos personajes, cada uno de ellos con sus habilidades. Os lo contamos todo en nuestro completo análisis de la última entrega una serie a la que seguro le queda mucho por decir.