Los 120 FPS es uno de los caballos de batalla de la nueva generación de consolas, junto a la resolución 4K y el HDR (entre otras muchas terminologías y tecnologías de relumbrón, como el raytracing). Sony y Microsoft no han parado de hacer hincapié en la posibilidad de disfrutar de nuestros juegos favoritos con más imágenes por segundo que nunca antes en consolas, con mayor definición y una iluminación espectacular. Sin embargo parece que PS5 está teniendo más problemas que su competencia para alcanzar dicha tasa de imágenes, aunque parece que el problema no viene de que a la máquina de Sony le falte potencia, sino a que el kit de desarrollo de PS5 no está tan preparado en ese aspecto como el de Microsoft.
El último ejemplo de esto lo vemos con Mass Effect Legendary Edition que en Xbox Series puede funcionar a tan ansiada velocidad, mientras que en PS5 se queda en 60FPS, que tampoco son moco de pavo. Podéis comprobarlo en el siguiente cuadro:
Es la misma historia que diversos juegos multiplataforma lanzados desde el advenimiento de las nuevas máquinas de videojuegos de ambas compañías. Pasa en Rocket League, en Call of Duty: Warzone y en varios títulos más. Sin embargo, hace ya unos meses que los desarrolladores lo dejaron claro, y es un tema que no tiene tanta miga como a algunos les gustaría.
La explicación sencilla sería que en los juegos desarrollados para la anterior generación de consolas activar la posibilidad de jugar a 120HZ en Xbox Series X/S es un parche menor, gracias a cómo funciona la retrocompatibilidad en este sistema. Sin embargo para poder hacer lo mismo en PS5 hay que hacer mucho más trabajo, con un port específico (lo que supone meses de trabajo) para que esta versión funcione a dicha tasa de refresco. Por tanto es posible, pero simplemente no es operativo para las desarrolladoras, ya que funcionar a 120FPS no es algo realmente relevante para la mayoría de jugadores, que ni siquiera tienen un monitor o TV que soporte dicho formato. También es un problema arraigado en la configuración de PS5, que no iba a ser retrocompatible en un principio, según determinadas fuentes, lo que hace que aprovechar el código de la versión PS4 y añadir mejoras sea algo más complicado en este lado de la balanza.
En resumen, que si crees que PS5 es menos potente que Xbox Series por la tasa de imágenes por segundo de los juegos multiplataforma, estás fijándote en las pruebas equivocadas. El verdadero potencial de las nuevas consolas empezará a aprovechar con los juegos comunes diseñados específicamente para PS5 y Xbox Series X, y hasta entonces cualquier conclusión que tratemos de sacar sobre el rendimiento de sus hardwares serán puras conjeturas.