Hace apenas dos días nos hacíamos eco de una noticia muy importante para los fans de los juegos de lucha. Project L, el título de pelea basado en el mundo de League of Legends y que tiene al responsable del EVO Tom Cannon en puestos de responsabilidad, estaría celebrando durante estos días unas pruebas presenciales con rostros importantes del sector.
La noticia corrió como la pólvora, en parte por la expectación tras la espera tan larga a la que han estado sometidos los fans de este videojuego. Sin nuevas imágenes desde casi su presentación durante el décimo aniversario de League of Legends, y apenas algo de información que llevarnos a la boca durante todo este tiempo, parece que el juego afronta una nueva fase en su desarrollo. Pero si nos atenemos a cómo ha procedido Riot Games previamente, especialmente con Valorant, quizás podemos ver una conexión.
¿Qué pasó con Valorant?
A día de hoy sabemos que Valorant ha estado muchos años en desarrollo, pero lo cierto es que nunca se filtró antes del anuncio. De forma oficial, Valorant salió el 2 de junio de 2020, pero antes de eso pasaron muchas cosas. Durante el mes de marzo de 2020, se produjo una prueba para profesionales, históricos de la escena de los shooters y creadores de contenido.
Dicha prueba es conocida por todo el mundo, porque iba a celebrarse de forma presencial en varios puntos del mundo, destacando Los Angeles para Norteamérica y Barcelona para Europa. La cancelación a causa del coronavirus, que ya nos empezó a molestar por aquellos días de marzo, hizo que la noticia corriera como la pólvora. Pues apenas unas semanas después, el 7 de abril a las 14 horas, arrancó la archiconocida beta cerrada de Valorant a la que tuvimos que acceder viendo partidas en Twitch y esperando el drop.
¿Y si sale este mismo año? (aunque sea en beta)
Riot Games no es una compañía que improvise. Con Wild Rift vimos una forma de proceder similar, con pruebas selectas poco antes del lanzamiento de una beta regional. El sistema para poder acceder cambiaba a una diferenciación por regiones, pero los tiempos han sido similares.
Es cierto que el testeo se realiza casi desde el principio de los proyectos, pero estas pruebas que ya transcienden, suelen tener algo sólido en lo que apoyarse. Esto ya no es un grupo de testeo interno, es un proceso con gente a la que se le presenta un producto por terminar, sí, pero con una base sólida. Seguramente estemos hablando de unos pocos personajes y unos pocos escenarios.
Si esta prueba es similar a las que ha realizado Riot Games con Valorant, y extrapolando el calendario, parecería razonable pensar que septiembre de este mismo año sería una fecha a tener en cuenta. Todo esto, teniendo en cuenta que Riot Games trabaja mucho con fases betas y que el juego iría añadiendo contenido poco a poco, algo marca de la casa.