Genshin Impact es un éxito arrollador. De eso no hay dudas, y esa es la razón por la que miHoYo ha redoblado esfuerzos para ofrecer cada vez más cantidad de contenidos para su juego, como la reciente llegada de Rosaria al título.
Sin embargo esto no implica que todos los usuarios estén contentos con el rumbo que ha tomado el juego, ya que se ha iniciado un movimiento de queja contra Genshin Impact a través de redes sociales con el hashtag #BoycottGenshin.
Aunque las razones detrás de estas quejas no son uniformes, vamos a intentar contaros de qué va todo este asunto. Atentos.
¿De qué se queja el #BoycottGenshin?
Todo parece brotar de una discusión por los Hilichurls, tras lanzar miHoYo un vídeo en el que se ve un baile indígena como punto de referencia para ello, aunque hay quien afirma que es por los rumores de retraso en el lanzamiento de los próximos contenidos. Sin embargo desde que este movimiento de queja apareció ha resurgido con fuerza en diversos momentos, e incluso ha ido sumando motivos de cabreo por parte de los usuarios. Se habla de racismo,sin ir más lejos, con dos personajes jugables y un NPC. La discusión ha continuado, con fans justificando las acusaciones y diciendo que son excesivas, pero con una continua de sensación de Deja vu y repetición en las situaciones y las quejas, como se puede ver en el foro de reddit del juego.
De todas las acusaciones, la que más peso tiene es la de utilizar una danza indígena en el juego, por apropiación cultural, y por usar una tradición de una manera claramente cómica, taly como afirman algunos miembros de la cultura indígena que está afectada por esta decisión de diseño de miHoYo.
Desde el otro lado, aunque se reconoce como poco acertado el movimiento de miHoYo, se afirma que los Hilichurls no son malos per sé, sino que están siendo manipulados por los villanos de una forma similar a los bokoblins de The Legend of Zelda: Breath of the Wild, que siempre ha sido una de las influencias más importantes de Genshin Impact.
Una discusión que toca las raíces del propio videojuego
Tal y como afirman en Kotaku, esta tendencia de usar elementos de culturas tribales para los enemigos más primitivos no es nueva, y se ha visto mil y una veces con elementos de todas las culturas indígenas posibles (¿quién no recuerda enemigos con un toque vudú, por ejemplo?). Y si nos remontamos en el tiempo incluso los clásicos orcos de la fantasía medieval podrían pecar de esto, aunque se trata de una discusión mucho más candente y profunda de lo que podríamos adivinar.
La legitimidad de este movimiento, por tanto, queda manchada hasta cierto punto por el hecho de que haya usuarios que se suman a ello por un retraso en futuros contenidos. En cualquier caso el debate está servido. ¿Crees que el hecho de que los enemigos más básicos estén basados, aunque sea ligeramente, en elementos de culturas indígenas es un problema? Aunque nosotros tenemos nuestra opinión, queremos leer la tuya en los comentarios bajo estas mismas líneas.