Los aficionados a la competición de Counter-Strike han estado disfrutando en los últimos tiempos de una competición de lo más interesante. Se trata de la segunda edición de Snow Sweet Snow, un torneo en el que 44 equipos del segundo y tercer escalón europeo llevan compitiendo desde que arrancó el evento el pasado 15 de febrero y que está a punto de finalizar. Lo hará entre polémica, pero no por nada que haya sucedido en el servidor, si no por el trato de la empresa organizadora a sus trabajadores.
Poner en marcha un evento de estas características requiere de un buen despliegue de personal incluso si se disputa por completo en formato en línea. Sin embargo, parece que desde GRID, los organizadores del evento, no han sabido cómo mantener contentos a los trabajadores y se han hecho públicos los salarios que perciben los comentaristas por cada partida narrada. Unas cantidades muy lejos del estándar de la industria en terreno internacional.
Sin embargo, lo peor de la situación no han sido los escasos salarios. Lo que ha vuelto a buena parte de la comunidad en contra de los organizadores, y sobre todo del encargado de gestionar el equipo de comentaristas, ha sido la amenaza nada sutil realizada en el servidor de Discord en el que se organizan: “Para cualquiera que quiera compartir los salarios fuera del grupo, os recomiendo leer la sección 6.1 del contrato firmado con nosotros, llamada ‘Protección de Datos Confidenciales’. Cualquier futura noticia que escuche al respecto resultará en un despido inmediato”.
Según el comentarista (ajeno al torneo) que ha hecho pública la situación, la filtración ni siquiera habría sido realizada por los propios narradores del evento. A ellos, además, los insta a organizarse y preguntar cuáles son los estándares de la industria de cara a un posible acuerdo para renegociar el salario percibido. Especialmente, si tenemos en cuenta que la competición tenía un premio económico acumulado de 100.000 dólares para los equipos participantes.