Después de varios años de decadencia, el League of Legends norteamericano se ha renovado para comenzar una nueva etapa. La LCS se pone a la altura de las grandes ligas con un formato renovado que ya nos dejó las primeras sorpresas en un Lock In que superó las expectativas y que sirve de antesala para una fase regular que está a punto de comenzar y que se prolongará a lo largo de los próximos meses como una liga unitaria que unifica las fases de primavera y verano.
Los cambios van mucho más allá que el formato y han afectado a todo lo relacionado con la competición. El retiro de leyendas como Doublelift o Bjergsen han provocado un relevo generacional y la liga puede presumir de haber incorporado a estrellas llegadas de todas partes del mundo. Una renovación que invita a pensar en un aumento de la competitividad y que recupera la ilusión perdida de los aficionados gracias a conjuntos como Team Liquid que vuelven a aspirar a conseguir algo en el circuito internacional.
La LCS también ha querido ponerse a la altura del desafío estrenando un espectacular video con el objetivo de poner el hype por las nubes en las horas previas a la competición. Un recordatorio de que hoy arranca oficialmente una nueva etapa. Estrellas incipientes que deben emerger sobre las alargadas sombras de los que ya no están. Al fin y al cabo, son los responsables de conseguir prestigio para una región que parece incapaz de lograrlo.
La competición se pondrá en marcha en la noche del cinco de febrero y se disputará de forma ininterrumpida hasta el próximo 14 de marzo. A partir de ahí, torneos de mitad de temporada y un summer split que recuperará la acción de la liga antes del campeonato mundial. Narrativas enfrentadas con un único objetivo: convertir a la LCS en una de las grandes regiones por derecho propio.