Los cambios a League of Legends llegados en la pretemporada no solo afectaron al sistema de objetos. La desarrolladora aprovechó para cambiar diferentes estadísticas de entre las que hubo uno que destacó especialmente: la sustitución de la reducción de enfriamiento por la velocidad de habilidades. Un cambio que afecta a mucho más que la nomenclatura y que no ha recibido tanta atención como realmente merecía teniendo en cuenta como ha afectado a múltiples elementos del juego.
Entre ellos, destaca el Dragón de Nube. Este monstruo neutral siempre ha tenido una particularidad: estar muy mal considerado en cuanto a la mejora que otorga por acumularlo, pero ser uno de los más poderosos en caso de conseguir un único dragón aislado a lo largo de la partida. Sin embargo, las estadísticas demuestran que esta situación hace tiempo que dejo de ser real y que esta criatura es una de las que menos influencia tiene en las partidas de League of Legends.
Un vistazo a los datos deja una conclusión contundente: el Dragón de Nube apenas ayuda a ganar una partida. Por separado es insuficiente en comparación a lo que pueden aportar el resto de las mejoras y en conjunto no hay diferencia entre tener esta alma o cualquier otra. Normalmente, el equipo que consigue eliminar suficientes veces a este monstruo tiene ventaja más que de sobra para vencer.
El Dragón de Nube siempre ha sido problemático en League of Legends. Riot Games cambió las estadísticas aportadas para tratar de mejorar la situación, pero parece evidente que no ha habido manera de reconducir la situación y que se trata de una mejora muy situacional que solo unos pocos campeones pueden aprovechar de forma eficiente. Algo que no se repite con la regeneración de vida del alma de Océano, el daño de la Infernal o el escudo que aporta la de Montaña
Además, la mejora que aporta tiene una de las mayores particularidades de todo League of Legends, ya que es completamente inútil para dos campeonas: Samira y Shyvana. Ninguno de estos dos personajes le saca rédito alguno. Especialmente doloroso el caso de la medio dragona, que recibió un cambio indocumentado que le hace no generar furia extra tras conseguir acabar con este monstruo épico.
Para mantener el equilibrio del juego, todos los objetivos neutrales deberían de resultar igualmente atractivos. El hecho de que algunos sean considerablemente menos efectivos tiene la capacidad para alterar el resultado de una partida, y desde la desarrolladora deberían de tomar medidas cuanto antes para volver a darle una oportunidad al dragón menos querido y eficiente del juego.