En términos generales, el nuevo sistema de objetos de League of Legends puede considerarse un añadido positivo para el juego. Está claro que hay unas cuantas modificaciones pendientes en forma de ajustes de poder para tratar de hacer que este más equilibrado. Sin embargo, ese no es ni mucho menos el mayor problema de esta serie de nuevos añadidos que se han realizado a lo largo de la última pretemporada.
La duración de las partidas, ligeramente inferior a las de la temporada pasada, hacen que completar tres objetos sea bastante complicado. En cerca de un 60% de las ocasiones, cuando haya caído uno de los nexos solo dispondremos en nuestro inventario de las botas, el ítem mítico y la que haya sido nuestra opción complementaria. Una situación que se hace todavía más pronunciada en función a la posición que estemos jugando y el oro que nos permita acumular.
Aunque puede parecer irrelevante, lo cierto es que algunas alternativas como el Filo Infinito o el Filoveloz de Navori solo son interesantes para llenar ese tercer o cuarto hueco en nuestro inventario. Una tendencia que se repite con otros de los muchos ítems introducidos por Riot Games en todas las categorías de cara a esta temporada y que impiden disfrutar de esa fantasía de conseguir un personaje superpoderoso en la mayor parte de las ocasiones que jugamos una partida de League of Legends.
El porcentaje oscila en función al personaje con el que lo comprobemos, pero en términos generales deja claro que lo más probable es que no consigamos nuestro tercer objeto. Algo que impide sacarle jugo a un sistema con muchísimas alternativas que ofrecer, pero pocas realmente atractivas durante unos primeros compases de la partida donde casi siempre se tienden a hacer elecciones de la misma categoría.
No hay una solución clara para esta situación. Riot Games lleva tiempo tratando de hacer que las partidas se ajusten lo máximo posible a los 30 minutos y no parece que quiera que duren más de lo que ya lo hacen. Una de las pocas alternativas es bajar el precio de forma generalizada, algo que podría sentar bien a League of Legends y evitar que combinaciones como el Moonstaff se conviertan en variaciones populares por ofrecer, exactamente, esta ventaja.