G2 Esports está de dulce. Después de llevar a cabo uno de los movimientos más ambiciosos de la historia del League of Legends occidental, el equipo ha conseguido hacer valer el fichaje de Rekkles contando sus tres partidas disputadas en lo que va de LEC por victorias. Volvió a mostrarse como un equipo dominador y capaz de sacar mucho partido las fases de transición de mitad de la partida. La orquesta de siempre, pero mejorada con el objetivo de conseguir mucho más que una superweek perfecta.
Tras el primer partido disputado, en el que los samuráis se llevaron por delante a un MAD Lions todavía falto de rodaje, Caps se ofreció a tomar los mandos del equipo en sala de prensa. Al otro lado del micrófono estaba Tom Matthiesen, un periodista con seis años de experiencia que tuvo la oportunidad de hacerle unas preguntas que el jugador quiso utilizar para reivindicar la importancia del triunfo cosechado.
Lejos de ser una anécdota, el carrilero central de G2 Esports señaló lo importante que era empezar ganando: “Es importante, especialmente para Rekkles, empezar bien. Lo peor que te puede pasar cuando te unes a un equipo que viene de ganar es tener malos resultados”. Además, el jugador le dio todavía más relevancia a su discurso en la siguiente respuesta. “El mundial no se gana en Worlds, se gana a lo largo del año. El esfuerzo de todo el año se traduce en lo que consigues allí”, dijo Caps.
El club se reivindica en su objetivo último: ganar el mundial. Sin embargo, desde G2 Esports saben que League of Legends es un juego donde el camino importa. No es casualidad que el año que llegaron a la final fuera uno plagado de éxitos en el que lograron llegar a la final vinieran de conseguir todos los títulos. Un Grand Slam que todavía es territorio por conquistar, pero en el que el club tiene puesta la mirada.