No hay ninguna duda de que Warzone ha sido el soplo de aire fresco que necesitaba Activision para volver a sacar a flote la franquicia de Call of Duty. Habiendo lanzado unas últimas entregas un tanto flojas que no estaban, en absoluto, llamando la atención. Modern Warfare estaría totalmente muerto de no ser por el lanzamiento de este battle royale, que llegó justo en el mejor momento, en pleno auge de la cuarentena por COVID-19 y de forma gratuita para todos los jugadores.
Blackout, en su momento, tampoco hizo las cosas mal, pero no supo pulir su sistema de juego al nivel de Warzone y, además, para poder acceder a él teníamos que pasar por caja adquiriendo Black Ops 4. Y si, por lo que fuera, no eras jugador habitual de Call of Duty, era más que evidente que no ibas a poder probarlo para ver si te enganchaba. La ventaja de Warzone, en ese sentido, es que al ser gratis ha conseguido captar tanto al público habitual de la saga, como a nuevos usuarios que jamás habían tocado un CoD en su vida.
Pero ninguno de estos, ni siquiera el battle royale de Call of Duty Mobile, fue el primero de la franquicia. Activision, junto con Tencent, ya probó suerte en el pasado con el BR de Call of Duty Online, un juego Chino que aunaba todo lo bueno de otras entregas y lo juntaba en un mismo continente. Básicamente, en todos los aspectos, CoD Mobile es simplemente una evolución de aquel juego.
Aquí os dejamos con un gameplay para que podáis echar un vistazo a cómo lucía (y luce) el juego:
Como podéis ver, si sois jugadores habituales de la saga y habéis tocado Mobile, Blackout y Warzone, veréis que la evolución que ha ido teniendo Call of Duty, en lo que respecta a los battle royale, parten de este título. El sistema de saqueo, las mejoras de las armas, la obtención de salud, escudo y ventajas... Call of Duty Online asentó las bases en silencio de lo que sería ahora mismo uno de los juegos más importantes del panorama multijugador.
En su momento pasó desapercibido, pero merece la pena sacarlo a relucir teniendo en cuenta todo lo que ha hecho por Call of Duty y, sobre todo, para Warzone. Hideo Kojima la lio también en silencio con Metal Gear Online 2 y su modo Deathmatch de Camuflaje (DMC) o Stealth Deathmatch, del que también os hablamos en su momento.