Desde el lanzamiento de League of Legends: Wild Rift ha comenzado una carrera por llegar a los primeros puestos de los rangos clasificatorios del nuevo MOBA para iOS y Android. Una carrera en la que la primera plusmarca la ha marcado un jugador español. Se trata de Clemares, que ha sido el primero en conseguir alcanzar el rango de Diamante, con un MMR (puntuación de emparejamiento) tan alta que el juego no es capaz de encontrar rivales para él.
El propio jugador ha expuesto la situación en repetidas ocasiones durante sus retransmisiones en directo y fue confirmada por un empleado de Riot, Jonathan Chao, que es el jefe de todo lo relacionado por la jugabilidad. Una consecuencia de su habilidad que, aunque puede ser algo molesta, también habla maravillas del jugador que se mantiene como el mejor de Europa. Eso sí, el tiempo que tarda en encontrar partida pueden usarlo sus rivales para recortar distancias.
Esta situación es relativamente habitual en League of Legends y, prácticamente, en todos los títulos que tienen sistemas de emparejamiento basados en la habilidad. El problema es bastante sencillo, cuanto más arriba se está en la clasificación, menor es la cantidad de jugadores que ocupan puestos similares. La cosa se acentúa, claro, cuando aun encima eres el que está en el peldaño más alto y tienes tanta ventaja.
Aun así, la situación se debería estabilizar conforme la comunidad del juego vaya asentándose en los rangos más altos. Se trata también de un problema relacionado con la falta de partidas de posicionamiento, que provoca que todos los jugadores tengan que empezar desde lo más bajo de la tabla y añade a la necesidad de ser un jugador habilidoso un importante sacrificio temporal para ir avanzando puestos en la tabla clasificatoria de League of Legends: Wild Rift. Por si pensabais que jugar en móviles era más fácil.
El League of Legends para móviles ya está entre nosotros, y con él grandes jugadores. Miles de personas pudieron ver la calidad que mostraron y sacar las primeras conclusiones sobre el juego en el máximo nivel competitivo.
