Probablemente lo sepas, pero nunca podrás tener en tus manos algunas skins de League of Legends como los aspectos de eventos y convenciones de videojuegos, como la PAX, gamescom u otros eventos regionales. Estamos hablando de Sivir, Jax y Twisted Fate PAX, así como de las máscaras de la Edición Coleccionista que solo estaban disponibles a través de la Edición Coleccionista física o digital (Silver Kayle, Black Alistar y Human Ryze).
En este momento, técnicamente, no hay forma de conseguirlos, aparte de comprar una cuenta que las tenga, algo totalmente prohibido por Riot Games. Durante años, muchos invocadores han afirmado, probablemente de forma falsa, que el estudio de alguna manera les permite conseguirlos. Riot Games nunca ha vacilado y es claro en esto, estas skins están y permanecerán encerradas en sus baúles para siempre... hasta que Garena entra en acción. Para aquellos que no lo sepan, Garena es una popular plataforma de juegos en línea que comenzó a ofrecer League of Legends en el sudeste asiático a partir de 2010. Garena tiene su propio trato con Riot que se remonta a esta época y, por lo tanto, tiene más libertad.
De forma habitual, Garena organiza loterías (una especie de máquina tragamonedas virtual) gracias a las cuales se pueden obtener skins de todo tipo, pero que son accesibles para todos los jugadores. Por supuesto, el sistema es de pago y debes apostar RP. Y como en el casino, la casa siempre gana. Puedes conseguir una skin rara, por supuesto, pero para lograrla probablemente habrás gastado más RPs que el precio original de la skins. Hasta ahora, Garena ofrecía aspectos que a veces ya no estaban en la tienda, pero que regresaban de vez en cuando, pero nunca habían ofrecido skins que fueran totalmente imposibles de conseguir.
Y aquí es donde la comunidad se queja ya que los jugadores del sudeste asiático pueden, con suerte, obtener, por ejemplo, las skins PAX o Corki OVNI.
Las prácticas de Garena con respecto a League of Legends ya han sido criticadas muchas veces por jugadores de todo el mundo. Generalmente, los jugadores tiene algunas ventajas, pero también han que aguantar maniobras mucho más abusivas que parecen ir en contra de todo lo que Riot Games hace en los servidores que administran. Un acuerdo que parece irrevocable y un mal necesario para que el juego esté disponible en esta parte del mundo.