Hace apenas unos minutos nos dejó Diego Armando Maradona, el que está considerado casi de forma unánime el mejor jugador de la historia del fútbol. El pelusa se estaba recuperando de su reciente operación con sus familiares y amigos, pero una parada cardiorrespiratoria hizo que su vida se terminase a los 60 años de edad. La conmoción, ya no sólo en el mundo del fútbol, está siendo enorme, pero siempre hay gente que saca beneficio de las desgracias.
En estos momentos las cartas Icono de Maradona dentro del modo Ultimate Team de FIFA 21 están subiendo de precio a una velocidad endiablada. La ley de oferta y demanda, así como los especuladores, están siendo los responsables de que la gente que quiera conservar un cachito digital del Diego en sus equipos de FUT, tengan que pasar por caja.
No se trata del primer caso de este tipo, ni será el último. Uno de ellos fue el del también argentino Emiliano Sala, futbolista del Nantes francés, cuyo cuerpo fue encontrado en el Canal de la Mancha hace más de un año. Su carta en FUT afrontó una subida de precio muy importante y EA Sports tomó la decisión de eliminar la carta del juego para que no se comerciara con la memoria de un joven.
En este caso estamos ante un tema algo distinto. Maradona ya no era un futbolista en activo y su carta pertenecía a un grupo de Iconos. Esta serie limitada homenajea a futbolistas retirados y es una de las joyas más preciadas de FUT por su enorme calidad dentro del juego y por su valor sentimental. Pues bien, dentro de esta colección hay jugadores como Sócrates o Garrincha, que ya han fallecido hace años.
Desconocemos cómo va a reaccionar EA ante este problema, pero este se le suma a futbolistas como Zlatan o Bale pidiendo respuestas sobre el uso de sus derechos dentro del videojuego.
La reclamación de Ibrahimovic y Bale respecto a su aparición en los juegos deportivos sin licencia específica parece que traerá más cola de la esperada, ya que a pesar de la justificación de EA de que tienen las licencias, los agentes de los jugadores no se dan por satisfechos y podrían demandar.
