Estos meses de Worlds suelen ser un torrente de buenas noticias para el plano competitivo de League of Legends: equipos que sorprenden por su gran nivel, jugadores que destacan y dan un salto de rendimiento, Riot Games realizando todo tipo de anuncios concernientes al juego... Sin embargo, en esta ocasión y durante el día de descanso de la fase de grupos de Worlds, hemos conocido una de las peores noticias que pueden acontecer en un deporte electrónico. La Oceanic Pro League (OPL) que engloba a la región de Oceanía, acaba de ser clausurada por Riot Games.
Esta noticia llega tras un gran Worlds por parte de Legacy Esports, el representante de la OPL en estos mundiales. Con un 3-1 en la fase de grupos del Play-In, consiguieron estar a un mejor de cinco de llegar por primera vez a la fase principal de Worlds; aunque LGD Gaming acabara con su camino con un duro 3-0.
"En Riot Games queremos construir unas ligas competitivas y sostenibles que deriven en el crecimiento comercial y atención de los fans, así como que apoyen el juego profesional y a tiempo completo. Desafortunadamente y a pesar de los mejores esfuerzois de nuestros equipos y jugadores, la OPL no ha cumplido nuestros objetivos para la liga y no creemos que el mercado en el momento actual pueda apoyar a la liga en estos momentos", relatan Malte Wagener, Managing Director de NA y Oceanía y Tom Martell, Global Esports Director of Operations.
Este cierre implica el adiós a las oficinas en Sydney de Riot Games, ya que su tarea principal era organizar esta competición. Eso sí, los jugadores profesionales de la región seguirán teniendo un camino para tener éxito, ya que Norteamérica absorberá la región de la OPL y sus jugadores no ocuparán un puesto como extranjero en las plantillas. Por último, los equipos locales seguirán teniendo presencia en MSI y Worlds en 2021, sirviendo dichos torneos para una despedida final de estos clubes.
Varios jugadores de la OPL han conseguido pasar a otras ligas principales, como varias academias de LCS o el caso de Destiny, apoyo de Origen durante 2020. Una mala noticia para el LoL de Oceanía y un refuerzo para una LCS que está hambrienta de nuevo talento.