A estas alturas de la película, con Call of Duty: Modern Warfare encarando su recta final, y Warzone preparándose para empezar el hermanamiento con Black Ops Cold War, no debería pillar de nuevas a nadie que a la última entrega de Call of Duty la comunidad le ha colocado es San Benito de ser un juego de camperos.
Y la verdad es que no les falta razón a los que piensan así. Sobre todo en los primeros meses de vida del juego los desequilibrios eran evidentes, con un sonido de pisadas exagerado y un tiempo para matar que apenas dejaba hueco a la reacción ante un enemigo bien colocado y esperando. El diseño de muchos de los mapas tampoco ha ayudado demasiado y localizaciones como Euphrates Bridge o el mapa en el centro de Londres lo han hecho aún más patente.
Por supuesto, Infinity Ward ha tratado de paliar el problema retocando mapas, modificando detalles como el sonido de la pisada y ajustando la jugabilidad para que los camperos no se sientan tan cómodos. Pero seamos sinceros, no ha valido de mucho al final, y los camperos siguen haciendo de las suyas en los angostos pasillos de los edificios de Warzone o en los largos corredores de cada uno de los mapas.
Al menos la comunidad se lo ha acabado tomando con filosofía, como en el vídeo que encontraréis a continuación, que ilustra a la perfección la sensación de que Call of Duty: Modern Warfare es un juego de camperos. Y punto.
Por suerte parece que en la próxima entrega de la serie, Call of Duty: Black Ops Cold War Treyarch no optará por las mismas decisiones que condenaron en cierta medida a Modern Warfare a llevar la coletilla de 'juego de camperos', y ya incluso han anunciado el aumento del time to kill para que la habilidad tenga algo más de importancia dentro de cada partida.