Los Worlds 2020 de League of Legends comenzarán el próximo 25 de septiembre con un play-in que dará acceso al evento principal. Sin embargo, no todos los equipos llegarán con las mismas oportunidades a la máxima competición internacional del año debido al sistema de burbuja que acompañará al evento para evitar poner en juego la salud de los participantes.
Todos los equipos a excepción de los chinos tendrán que pasar un periodo de cuarentena en el que no podrán tener más contacto humano que el imprescindible. Dos semanas en una habitación del hotel en el que se hospedan sin poder siquiera realizar entrenamientos conjuntos de forma presencial.
Aunque la situación está lejos de ser óptima, parece un sacrificio necesario. El problema viene si tenemos en cuenta cómo afectará esta coyuntura a los Worlds 2020. Especialmente de cara al play in, que empieza en apenas 15 días y solo LGD podrá entrenar con normalidad y mantener una rutina equilibrada que no incluya aislamiento.
De cara a los grupos, al menos los equipos tendrán unas 8 o 10 jornadas de entrenamiento en función a su fecha de llegada a Shanghái. Parece un sacrificio inevitable para que la competición pueda disputarse de forma presencial y el protocolo será estricto, pero es difícil no pensar en las ventajas competitivas que aporta a los equipos de la región.
Al menos parece que los jugadores disponen de buenas instalaciones a su disposición y, sobre todo, una conexión a internet más que competente. Muchos equipos de ligas regionales trabajan de forma remota todo el año y hay herramientas para hacerlo. Ante la situación actual queda poco más que resignarse y aceptarlo como el mal menor.