No cabe duda de que Jakob "Yamatocannon" Mebdi salió de su zona de confort al firmar como entrenador jefe del equipo surcoreano de League of Legends Sandbox Gaming. De esta forma, Yamato se convertía en el primer técnico occidental en dirigir un equipo de la LCK, convirtiéndose en todo un pionero a cambio de una mochila de presión gigante a la espera de los resultados de su trabajo.
Tras pasar la pertinente cuarentena de 14 días, YamatoCannon pudo al fin estar de cuerpo presente en el partido de Sandbox en la LCK, donde el equipo logró la victoria frente a Team Dynamics por 2-1. El técnico sueco llegó con la intención y casi el deber de revolucionar un rol, el de entrenador jefe, que aunque cuenta con profesionales del más alto nivel en Corea del Sur, en ocasiones carecen de la afabilidad y la empatía con sus jugadores de los occidentales.
Romper con el statu quo no es fácil, y de hecho para esto hace falta que primero se gane la confianza de sus jugadores y consiga que estén convencidos tanto de su liderazgo, como de su filosofía de juego. Y para hacerlo, Yamato se ha apoyado en uno de los técnicos más brillantes de la historia del deporte como es Phil Jackson, haciendo gala del simbolismo del que el Maestro Zen siempre ha usado en sus equipos.
Phil Jackson ha logrado un total de 11 anillos de la NBA, repartidos entre los Chicago Bulls de Michael Jordan, los Lakers de Shaq y Kobe y los posteriores de Pau y Kobe. Su éxito inapelable en la competición redundó en una búsqueda sin descanso entre su método para dar con las claves que le diferenciaban de los otros entrenadores de la NBA, y del deporte en general. En 'The Last Dance' se puede constatar que no era un técnico más y que trataba de manera empática y personal a cada uno de sus jugadores, llegando incluso a domar a nada más y nada menos que Dennis Rodman.
La propietaria de Los Ángeles Lakers Jeannie Buss comentó hace un tiempo en su Instagram personal una curiosa práctica de Phil Jackson que ejemplifica el método del apodado como "Maestro Zen". Cada principio de temporada, Jackson regalaba un libro a cada uno de sus jugadores dentro del cual había una moraleja o conocimiento personalizado para cada uno de ellos: “Algunos lo recibían con entusiasmo, pero otros los dejaban de lado. ¡Hubo una vez que Shaq incluso escribió un informe sobre su libro! Phil disfrutaba cultivando la curiosidad intelectual en sus jugadores. Tener una mente abierta y buscar nuevas experiencias, hacer preguntas y nunca decir que algo es aburrido antes de darle una oportunidad”.
Pero Phil no era una persona autoritaria, ni siquiera con este tipo de rituales que llevaba a cabo: "Me entristecía escuchar que algún jugador bromeaba al respecto, no quería que hirieran sus sentimientos. Una vez le pregunté si le molestaba. Su respuesta me dejó alucinada. Me dijo: ‘No, no me molesta. Si reciben el libro, lo ponen en una estantería y se queda allí durante 10 años, eso está bien porque llegará un día en que lo lean y el mensaje le llegará. No hay un calendario para el aprendizaje".
Tal y como reconoció YamatoCannon a los compañeros de Inven Global en la entrevista postpartido de ayer, les regaló a cada uno de ellos una bola de dragón, objeto icónico del manga y de la serie de anime 'Dragon Ball': "Soy un gran fan del simbolismo y de los rituales. Si reúnes las siete bolas de dragón, Shenron aparece... Quería decirles que, si trabajan juntos, pueden convertirse en Shenron y cumplir sus deseos".
Este mensaje, centrado en el apoyo mutuo, se repite en las respuestas de Yamato al mensaje que les dio a sus jugadores tras el 1-1 en la serie, cuando les transmitió que "tenían que ser una familia dentro del juego". No es una revolución jugable, pero es un mensaje potente que puede ser una semilla que termine germinando en un juego en equipo potente. En una de las máximas competiciones de League of Legends, el nivel individual casi se presupone, por lo que es necesario que se desarrollen sinergias que hagan elevar el potencial del equipo como unidad.
Gracias al tratamiento de estrella que está teniendo Yamato en Corea del Sur, la LCK realizó multitud de fotos centradas en él y su trato con los jugadores. El frío trato que suelen tener los técnicos de dicha región con sus jugadores, es rechazado frontalmente por el entrenador sueco. Abrazos, sonrisas y muestras de complicidad por doquier que rompen con la imagen tradicional de los equipos coreanos en el fotocall; donde apenas esbozan un conato de sonrisa de Pascuas a Ramos.
Este cambio de paradigma no significa que Sandbox vaya a empezar a ganar todos sus partidos y que comiencen a desplegar un League of Legends de muchos quilates, de hecho no es ni una garantía para que logren sus objetivos de esta temporada. Lo que sí está claro es que de conseguir grandes cosas, Yamato tiene ante sí la posibilidad de cambiar para siempre el LoL en Corea del Sur.
El reto estará en no creerse más importante que su tarea, y para eso también hay sabiduría procedente de Phil Jackson: "Como líder, tu trabajo consiste en hacer todo lo que esté en tu poder para crear las condiciones perfectas para el éxito mandando al banquillo tu ego e inspirando a tu equipo a jugar de la manera correcta".
Fotos de lolesports.