El nuevo rework de Volibear no se está adaptando bien a League of Legends. El oso no parece capaz de hacer valer el terror que infundía durante la presentación y en los diferentes tráileres en los que Riot Games lo mostró. La transición a la Grieta del Invocador nunca es sencilla, pero está siendo todavía más complicada de lo habitual.
Con más de 4.700 partidas analizadas por la web lolalytics a la hora de redacción de esta noticia, Volibear apenas cuenta con una ratio de victorias del 36.20%. Este winrate es algo pobre incluso para un campeón que acaba de lanzarse o recibir un rework y supondrá un duro desafío para Riot Games.
La desarrolladora de LoL ya se comprometió en el pasado a realizar lanzamientos algo más conservadores y evitando tomar los riesgos que se permitieron con Aphelios o Senna. Los planes para los nuevos campeones sonaban fenomenal sobre el papel, pero ahora toca ver si Riot es capaz de cumplir con su palabra y evitar un nuevo caso Yuumi.
La campeona llegó a la posición de apoyo registrando una tasa de victorias ínfima. En los primeros días era como jugar con un personaje menos en el equipo. La Gata Mágica recibió una mejora a todas las estadísticas y parecía que se asentaba, pero de aquellos barros vinieron estos lodos y no hay más que ver como rinde Yuumi en la actualidad para darse cuenta del error.
Riot supo medirse con el rework de Fiddlesticks, aunque la situación no era tan preocupante como la actual de Volibear. Es cierto aquello de “a toro pasado todos somos Manolete”, y la desarrolladora tiene sobre la mesa una decisión difícil: sucumbir ante la tentación de acallar las críticas inmediatas que llegarán por el supuesto mal estado de forma del campeón o seguir con su plan a largo plazo.