TSM se ha visto envuelto en una polémica relacionada con el conflicto de intereses debido al fichaje de Doublelift y su relación sentimental con Leena, la presidenta del club. Pronto hubo otro motivo de escándalo con la filtración de una más que posible salida de Dardoch del club debido a una conversación telefónica que Leena mantenía en presencia de Doublelift, que estaba realizando una retransmisión en directo.
Pese a las explicaciones de Reginald, hay un aspecto igual de importante que ha pasado desapercibido. La unión de jugadores de la LCS norteamericana debería de ser ahora la encargada de velar ahora por los intereses del todavía jungler de TSM. Sin embargo, esta asociación tiene en su directiva a tres de los actuales compañeros del jungler: Bjergsen, Doublelift y Biofrost.
Si el conflicto de intereses era una cuestión problemática ya con el fichaje de Doublelift, esta situación es todavía más problemática. ¿A quién van a defender los responsables de la asociación de jugadores, al equipo que les paga el salario o a su compañero? ¿Estará Doublelift al pie de cañón para defender a su todavía compañero o protegerá los intereses de Leena? Tampoco se libra Bjergsen, copropietario de TSM.
El League of Legends de Norteamérica se está enturbiando y los conflictos de intereses parecen salir de debajo de las piedras. Resulta como mínimo extraño que los jugadores deban de enfrentar este tipo de situaciones y Riot debería de buscar soluciones a este tipo de problemas antes de que se agraven todavía más.